De nueva cuenta, la organización Red Fronteriza por los Derechos Humanos (RFDH) convocó a decenas de ciudadanos de ambos lados de la frontera, para repudiar el muro construido por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
Mediante la iniciativa "Abrazos no muros", los habitantes, principalmente de Ciudad Juárez y de El Paso, Texas, y del estado de Nuevo México, se dieron el abrazo a través del muro, ubicado a la altura de la colonia Rancho Anapra, donde esta vez, la creciente del río impidió a los fronterizos abrazarse en el lecho del Río Bravo.
No obstante, los convocantes se acercaron lo más que pudieron, para verse, tanto padres, hermanos, hijos, sobrinos, así como amigos. Todo, ante la vigilancia de la Patrulla Fronteriza de aquel país, como de la policía municipal juarense.