Puebla. El 27 de septiembre de 1971 fue inaugurada uno de los monumentos más emblemáticos de la Angelópolis, la "Fuente de la China Poblana".
La fuente está ubicada al norte de la ciudad de Puebla y es una representación multicultural del legado poblano, además, es un homenaje a Mirra, princesa hindú raptada por piratas y bautizada por jesuitas con el nombre de Catarina de San Juan, cuya vida se desarrolló en la ciudad de Puebla.
De esclava a ícono de Puebla
La construcción de la fuente estuvo a cargo del artista, Jesús Corro Ferrer. Fue edificada con cantera rosa, la escultura tiene una altura de tres metros, la cual permanece sobre una base de 30 metros de alto. El cuerpo es lisado tallado en piedra y su ropa es de talavera.
La historia narra que no existe una imagen precisa de cómo lucía Catarina de San Juan, por lo que el autor, Jesús Corro, tomó como musa a su esposa para inspirarse al esculpir la figura.
La fuente de la China Poblana es considerada una de las más grandes que existe en la capital poblana, se ubica en la colonia Adolfo López Mateos, sobre el bulevar 5 de Mayo y Diagonal Defensores de la República.
Segunda fuente de la China Poblana
Sin embargo, en otro rincón emblemático de la ciudad de Puebla existe otra fuente dedicada a la China Poblana, la cual permanece en el Paseo Bravo.
Dicha obra fue donación de la colonia inglesa el 16 de septiembre de 1929, y se ubica en el lado sudeste del parque, es decir, sobre la avenida 11 Poniente.