La semana pasada, Interjet dejó de vender rutas nacionales en su página de internet; entre ellas Aguascalientes, Campeche, La Paz y Reynosa, las cuales dejarán de operar a partir del 28 de octubre.
La aerolínea ha justificado la salida de estos vuelos supuestamente por pérdida de slots en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, sin embargo, parece que el problema es su situación financiera.
En estos días se hizo público un reporte desarrollado por el grupo bancario HSBC, en el que alerta a la aviación civil del país sobre el nivel de apalancamiento que presenta Interjet, considerablemente más alto que sus competidores. Lo anterior se suma a los continuos problemas en sus aviones Sukhoi SuperJet 100, que han presentado ciertos desperfectos que en suma comprometen el futuro de la aerolínea.
También preocupa su falta de puntualidad, que de igual forma afecta sus operaciones. De acuerdo con cifras publicadas por la Dirección General de Aeronáutica Civil, sólo el 69% de sus vuelos llegaron a tiempo, y de continuar con este desempeño podría perder más horarios de despegue y aterrizaje, ya que no cumple con la nueva regla de 85% de puntualidad que estipula el recién modificado reglamento de la Ley de Aeropuertos.
El panorama que enfrenta Interjet se dificulta, y se suma a los recientes cambios de su equipo directivo, entre los que destaca la salida de su director de operaciones, de mantenimiento y de mercadotecnia.