Durango, Dgo. Las últimas semanas las medidas implementadas por el gobierno federal referente a la jornada nacional de sana distancia se relajaron en el estado de Durango, propiamente en la capital, negocios “no esenciales” comenzaron a abrir sus puertas por dos factores, el primero la desesperación por no generar un ingreso y el segundo la irresponsabilidad de las personas por no permanecer en casa. Esto ha generado un pico en los casos confirmados de la última semana, que por día en la actualización ha alcanzado como mínimo los 20 contagios. Esto sumado a las 42 muertes que ya se registran a nivel estatal.
Por otra parte, a unos días de que se pueda determinar o no el regreso a la nueva realidad en el país, estimada que ocurra el próximo primero de junio, gobernadores del país toman sus propias medidas según la necesidad y riesgos que ocurren en cada entidad. En el caso particular de Durango, José Rosas Aispuro Torres, mandatario estatal explicó que se tomará en cuenta el semáforo nacional con el acuerdo entre la secretaria de gobernación y la secretaría de salud para determinar por regiones lo que ocurrirá en la nueva realidad, pues en la entidad aún se mantiene en las semanas más peligrosas en cuanto al repunte de casos confirmados.
“Deberemos esperar no sólo varios días posiblemente varias semanas, para poder salir de la parte más crítica en Durango. No hemos llegado a la parte más difícil, esa está por llegar, por eso en Durango el escenario es diferente, atenderemos el regreso de manera lenta y gradual”.
“Nosotros tomaremos como referente el semáforo nacional con el compromiso que se ha hecho con la propia secretaría de gobernación y de salud del Gobierno Federal de que tendrán que tomarse en cuenta las consideraciones de cada entidad, y nosotros estamos dispuestos a que haya esta coordinación entre la federación y el estado para que podamos tener mayor efectividad en las acciones que emprendamos”.
Por lo pronto, los bancos lucen repletos de personas, la zona centro en su plaza de armas llena de personas que sin motivo sale de sus casas (muchos de ellos si respetar la sana distancia y no utilizan cubrebocas), los restaurantes comienzan a congregar mayor cantidad de comensales, ante un panorama que no luce nada alentador para el estado y mucho menos para su capital.