Para Guillermo Korkowski, jefe del Centro de Control Animal de Guadalajara y experto en temas relacionados con la rabia, en Guadalajara tenemos mucho que celebrar pues ya son más de 25 años en los que no se ha tenido ningún caso de rabia.
Las campañas de vacunación que se hacen año con año, concretamente en el Centro de Control Animal los 365 días del año de manera gratuita han contribuido en este logro.
El último caso de rabia que tuvo lugar en el estado de Jalisco, se detectó en el 2011 en el municipio de Tepatitlán, en donde un zorrillo contagió a un gato y a su vez, este transmitió la enfermedad a una persona.
Actualmente la rabia urbana se encuentra erradicada, no así la rabia paralítica bovina, que es transmitida por un murciélago hematófago y quiróptero y que generalmente afecta a los bovinos y equinos, más no a los humanos.
Sobre la creencia acerca de que ratas y ardillas, también podrían transmitir este virus, Guillermo Korkowski dejó claro que al ser animales que no cuentan con glándulas salivales, es imposible que puedan afectar a una persona, debido a que es precisamente por medio de este fluido que el virus penetra en el torrente sanguíneo.
“Casualmente me tocó a mí, participar en la primer campaña antirrábica en 1976, año en el que la escuela veterinaria tomó un papel muy importante cuando se trabajó casa por casa; de ahí a la fecha la universidad participó durante 8 años de manera consecutiva con mil 200 vacunadores. La vacuna nos la proporciona la Secretaría de Salud y el vínculo para nosotros es que somos un eslabón muy importante en materia de rabia, porque en los Centros de Control Animal se aplican cotidianamente las vacunas de manera gratuita y durante todo el año”, indicó Korkowski.
El virus de la rabia afecta principalmente al sistema nervioso central de los animales, generando en ellos una actitud agresiva, posteriormente, dejan de ingerir alimentos y líquidos, comienza a presentar parálisis en sus músculos y más adelante viene la muerte, como lo explicó el experto, quien además recalcó, que en gran parte, la erradicación de esta enfermedad en zonas urbanas obedece al éxito de las campañas masivas de vacunación.
“Nos unimos a esta celebración; hace más de 40 años que iniciamos con las campañas de vacunación y estamos viendo finalmente el fruto de este trabajo y hasta la fecha no hemos bajado la guardia y seguiremos trabajando como hace cuarenta años porque sabemos que de eso dependerá que no tengamos un caso sospechoso o positivo”.