En el marco de la transición del Seguro Popular al Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), Guanajuato presenta un déficit de mil 500 millones de pesos en este rubro, por lo que las secretarías estatales de Finanzas y Salud ya definen estrategias para la obtención de fondos y no afectar la atención médica a los guanajuatenses.
En este sentido, el gobernador Diego Sinhue Rodríguez Vallejo reiteró que por ningún motivo firmará la carta de intención para incorporarse al nuevo esquema del Insabi ya que, considera, sería entregarle el Sistema de Salud a la Federación y por ende, perder más dinero.
Señaló que este viernes sostuvo una reunión con el secretario de Finanzas, Inversión y Administración de Guanajuato, Héctor Salgado Banda y con el titular de la Secretaría de Salud, Daniel Díaz Martínez, para hacer un análisis de cómo suplir este recurso sin generar afectaciones a otras áreas de la dependencia a cargo de Díaz Martínez.
Sin mencionar nombres, refirió que se realizará un “análisis serio” de los prepuestos a ejercer en el resto de las dependencias estatales para ver qué ajustes se pueden realizar y no dejar caer al Sistema de Salud estatal, adelantando que no puede recortar recurso a los programas de prevención del dengue o la nómina de médicos, enfermeras y personal administrativo de la SSG.
El 19 de diciembre de 2019, el Congreso del estado aprobó el presupuesto de egresos para el ejercicio fiscal a ejercer durante el año en curso por la cantidad de 87 mil 300 millones 843 mil 251 pesos; previo a ello, en la última sesión del pleno, se hicieron modificaciones de la propuesta que presentó el Poder Ejecutivo, quitándole recursos a la Secretaría de Finanzas y se redistribuyó a seguridad y desarrollo social.