El ayuntamiento del municipio de San Miguel de Allende aprobó los ‘Protocolos para la Reapertura de Hoteles’, los cuales reabrirán al 40% de su capacidad a partir del 15 de julio, destacando que dicha acción no significa la entrada en vigor de la fase 1.
Tal desición fue acordada por unanimidad de votos con el objetivo de que el municipio pueda recuperarse con fuerza y en las mejores condiciones, dijo el presidente Luis Alberto Villarreal García.
Será desde el martes 30 de junio, que los hoteles podrán abrir sus reservaciones, y hasta el 15 de julio comenzarán a hospedar a un 40% de su capacidad; siempre y cuando el establecimiento y todo el personal tenga la certificación municipal “Primero la salud”, que es gratuita y obligatoria.
El gobierno municipal creará un grupo especial para acelerar las visitas de este proceso de certificación. El registro es a través de la página web oficial, www.sanmigueldeallende.gob.mx.
En suma, el gobierno municipal buscará que con estas acciones para la reactivación económica paulatina, responsable y ordenada del sector, San Miguel de Allende sea el primer destino turístico sin playa, en América Latina, con el reconocimiento mundial del Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC, por sus siglas en inglés) como confiable y seguro.
La Secretaría de Turismo del Estado de Guanajuato comprometió abrir 200 lugares para liberar rápidamente su aval “Guanajuato Sano”, dirigido a los prestadores de servicios turísticos para certificarse como un establecimiento seguro y está disponible en la página sectur.guanajuato.gob.mx
El alcalde Villarreal García reconoció que es preocupante que incremente el número de contagios en San Miguel de Allende y llamó a los prestadores de servicios:
Aprueba ayuntamiento acatar suspensión
Asimismo, ante la orden de suspensión de no modificar la zona de preservación ecológica de “El charco del ingenio”, por parte del magistrado de la Primera Sala del Tribunal de Justicia Administrativa del Estado de Guanajuato, el presidente municipal, Luis Alberto Villarreal García sometió a votación dejar la zona natural protegida en 392 y no en 396 hectáreas.
A esta medida, dijo Villarreal García, “votamos todos y todas -integrantes edilicios- en consciencia, para darle un espacio de amortiguamiento mayor, pero lamentablemente eso tampoco les gustó -a las asociaciones que buscaron la suspensión. Lo digo públicamente, este gobierno promueve la sustentabilidad. Con gusto lo acepto -la medida- aunque me parece una aberración jurídica la resolución… pero la respeto”, concluyó.