Puebla, PUE. El arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa, agradeció a quienes realizan acciones para apoyar a las familias damnificadas tras la explosión en San Pablo Xochimehuacan, a partir de una toma clandestina de gas LP.
Durante la misa dominical celebrada en la Catedral de Puebla, Monseñor Sánchez Espinosa, llamó a seguir llevando ayuda ya que existen personas que no tienen para comer y quienes se quedaron sin su vivienda y están durmiendo en casas de familiares y amigos.
Resaltó que desde el primer momento en que se presentó la tragedia, los párrocos y fieles se organizaron para brindar apoyo a quienes quedaron en desgracia; sin embargo, todavía se presentan necesidades de alimentos.
Recordó que la iglesia católica mantiene abiertos sus templos como centros de acopio para recibir alimentos que serán destinados a las personas más necesitadas de la junta auxiliar ubicada al norte de la capital del estado y resaltó la labor del párroco, Guillermo Campos, quien organizó a sus grupos religiosos para organizar la entrega de comida y despensas.
Sánchez Espinosa resaltó que, a una semana de la tragedia, todavía existe un número importante de familias que se quedaron sin hogar y que siguen requiriendo apoyos para alimentarse y para descansar.
INFORMACIÓN: JAIME ZAMBRANO, MILENIO PUEBLA