El robo de combustible no solo ha elevado la violencia en el estado de Guanajuato, ubicándolo en el primer lugar de homicidios cometidos con arma de fuego, sino que este delito también ha tenido un impacto en el medio ambiente, colocando a la entidad en el primer lugar por el número de hectáreas afectadas.
De acuerdo con información entregada a MILENIO tras una solicitud hecha a la Procuraduría Federal del Medio Ambiente, el estado de Guanajuato cuenta con 153.7 hectáreas contaminadas acumuladas durante el sexenio, cifra muy superior al daño ocasionado por los huachicoleros en todo el país.
Fue en 2017 cuando se registró la mayor cantidad de terreno afectado con un total de 100 hectáreas. Así la entidad concentra el 52.4 por ciento del total de hectáreas que han sido contaminadas producto de fugas en las tomas clandestinas que los grupos criminales utilizan para sustraer combustible de manera ilegal.
Según la información proporcionada por la Dirección General de Inspección de Fuentes de Contaminación en todo el país, durante el actual sexenio se contaminaron casi 300 hectáreas de terreno producto de las fugas en tomas clandestinas.
“Durante el período 2012-2018 se reportaron para todo el país 4 mil 386 emergencias acusadas por tomas clandestinas con afectación al suelo, de las cuales 2 ml 615 no reportaron al área afectada.
De las mil 771 restantes se reportó una superficie total de 292.94 ha ”, señala la información entregada a MILENIO por la dependencia. Por debajo de Guanajuato, aparece el estado de Tabasco con 53.43 hectáreas contaminadas, muy lejos del primer lugar, en tercero se ubica el estado de Puebla con 24. 72 hectáreas, entre las entidades menos afectadas aparece en la lista el estado colindante con Guanajuato: Aguascalientes con apenas 0.03 hectáreas de afectación así como Michoacán y Zacatecas, con 0.84 cada uno.
El estado de Guanajuato incrementó hasta en un 2 mil por ciento las afectaciones por huachicol en tan solo un año, ya que en el 2016 solo se contaba con 5.2 hectáreas afectadas y con datos actualizados al 2017 ya se cuenta con 100.02, ha sido el incremento más importante que se ha dado.
En cuanto a tomas clandestinas, la entidad ha tenido un avance significativo en la reducción de éstas pues en una de las últimas reuniones del Grupo de Coordinación Guanajuato en el que trabajan en conjunto la paraestatal, autoridades federales y estatales, en los primeros meses del año la entidad pasó de ser el primer lugar al tercero con 563 válvulas detectadas.
En los primeros lugares se encontraban el estado de Puebla, con 801 tomas; Hidalgo, con 606; y le siguen al estado entidades como Veracruz, con 551, y finalmente Jalisco, con 481
Como antecedente, en 2017, Guanajuato fue el primer lugar nacional con más tomas clandestinas, con mil 852 carpetas de investigación abiertas. En total, durante los primeros cuatro meses de este año, las tomas a los ductos de Pemex arrojaron una suma de 5 mil 176 en todo el país, un aumento de 49% respecto a las 3 mil 467 observadas en los primeros cuatro meses de 2017.
Bajo este escenario, el gobernador Miguel Márquez Márquez ha señalado en diversas ocasiones que uno de los mayores problemas que tiene el estado de Guanajuato es precisamente el robo de hidrocarburo y que se tiene que trabajar de la mano con Pemex para erradicarlo.
En agosto del presente año, el mandatario aseguró que se retomaría un operativo de sellado en las tomas clandestinas , a través de concreto para de esa manera evitar que pudieran ser reactivadas en algún momento por los huachicoleros.
En diversas ocasiones, tanto el Secretario de Seguridad del Estado de Guanajuato, Álvar Cabeza de Vaca Appendini, como el Procurador de Justicia, Carlos Zamarripa Aguirre , han asegurado que el 80% de los homicidios en la entidad están directamente involucrados con el robo de hidrocarburo.