El secretario de la Defensa Nacional, Salvador Cienfuegos, advirtió que el florecimiento del robo de combustibles se debió “a omisiones de algunas autoridades” y que esta problemática, “de ningún modo, es de las fuerzas armadas”.
“Lo que hacemos es apoyar a las fuerzas de Seguridad Pública a petición de los propios gobiernos estatales... esta problemática es de los gobiernos, es un asunto que deben resolver los gobiernos”, aclaró.
En Tijuana, Baja California, donde participó en la inauguración de la sucursal 23 de Banjército en el cuartel militar Morelos, destacó que el ilícito ya se está atendiendo junto con los gobierno locales.
Respecto a la violencia y el incremento de homicidios en la frontera norte, expresó: “Me preocupa todo el país, no nada más Tijuana; hemos tenido reuniones con el gobernador para ver cómo atender el problema”.
El secretario de Hacienda, José Antonio Meade, consideró que las fuerzas armadas hacen labores de seguridad donde todos los demás han fallado, como son autoridades estatales y municipales.
En Hermosillo, Sonora, durante la inauguración de la sucursal 14 de Banjército, recordó lo sucedido en Puebla y aseguró que “las autoridades se han quedado cortas” ante el robo de hidrocarburos.
El funcionario agregó que el uso de las fuerzas armadas surgió “porque fallaron las instancias municipales, porque se quedaron cortos los esfuerzos estatales e, incluso, a nivel federal no se acreditó la solidaridad y la atención que debiéramos, con un reto que hoy nos implica un problema de seguridad interior”.
Externó a los integrantes del Ejército que no están solos y “que nos duelen los retos que enfrentan y quienes han caído al servicio del país”.
Reiteró que las personas dedicadas al robo de combustible causan un perjuicio a la nación por 20 mil millones de dólares al año.
“Nada tiene de pequeño ese reto, y de ese tamaño es el compromiso de las fuerzas armadas que hoy necesitamos para que nos apoyen a enfrentar esa gran contingencia”, afirmó.
En tanto, en Tijuana, donde también participó en la inauguración de una sucursal de Banjército (23), refrendó el compromiso de la dependencia que encabeza con las fuerzas armadas.
Dijo que esta institución “es una expresión cercana con quienes nos cuidan, con quienes nos acompañan en los desastres naturales, con quienes nos tienden la mano cuando la delincuencia agobia”.
Durante la gira de trabajo señaló que el reto que México enfrenta en materia de robo de combustibles es un riesgo de seguridad interior.
“Se trata de una provocación de las redes criminales, que de manera inmoral y sin escrúpulos corrompen, manipulan, intimidan y amedrentan a comunidades enteras. Queremos prometer que, en este esfuerzo, nuestras fuerzas armadas nunca se sientan solas”, dijo.
Meade recordó que el presidente Enrique Peña Nieto instruyó a conformar una estrategia integral para combatir esta actividad criminal. Explicó que, cuando vemos un fenómeno como el robo de combustibles, tenemos que reconocer fallas en los diferentes niveles de gobierno y en las distintas instancias.
“No basta con reconocer el dolor de nuestras fuerzas armadas, es necesario que esa expresión de solidaridad se acompañe de compromisos. Las palabras de condolencia suenan huecas si no se acompañan de un compromiso de acción”, indicó.
El secretario advirtió que quien regatee su apoyo a actualizar el marco normativo será también cómplice de quienes saquean, por ello pidió hacer lo propio y estar a la altura del reto.
Destacó que las sucursales inauguradas representan una inversión de 30 millones de pesos, 12 millones en Tijuana y 18 millones en Hermosillo.
El vicecoordinador del PRI en la Cámara de Diputados, Jorge Carlos Ramírez Marín, aseguró que la delincuencia organizada busca desacreditar al Ejército y pidió una investigación a fondo del video que muestra una ejecución extrajudicial en Puebla, pues un elemento no es la corporación.
“La sociedad debe entender que si tienen (los huachicoleros) poder para blindar autos, para disparar más balas que el Ejército, para levantar a toda una población, cómo no van a tener poder para armar una campaña contra las fuerzas armadas, cómo no van a tener dinero suficiente para comprar conciencias y cualquier tipo de actividad profesional que los ayude a hacer una campaña contra ellos. Lo que quiere la delincuencia organizada, evidentemente, es desacreditar al Ejército”, dijo en entrevista.
El legislador señaló que, ante la incompetencia de los gobiernos estatales y sus sistemas de justicia, los grupos delincuenciales no solo en Puebla, sino en otras regiones del país, buscan que las fuerzas militares se retiren, porque son los únicos que los pueden enfrentar; enfatizó que estos hechos demuestran “qué tan necesaria es la ley de seguridad Interior”.