Según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), se estima que cada año más de 4 millones y medio de niñas y niños son víctimas de abuso sexual en nuestro país, por lo que México ocupa el primer lugar en este tipo de delito. Sin embargo, solo se denuncia uno de cada 100 casos.
En lo que respecta al estado de Jalisco, la Fiscalía estatal ha registrado mil 467 denuncias por abuso sexual a infantes en lo que va del año.
Ante este panorama, se inauguraron el Primer Encuentro Nacional por los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes y la Primera Jornada contra el Abuso Sexual Infantil, con la finalidad de dialogar las garantías y protecciones que se les brinda hoy en día a uno de los sectores más vulnerables de la sociedad mexicana.
Los eventos fueron presididos por autoridades de la Universidad de Guadalajara (UdeG), así como estatales y federales quienes, conmemoraron el 30 aniversario de la Convención sobre los Derechos del Niño, instaurada el 20 de noviembre, tratado ratificado por 196 países del mundo.
“Mientras la casi la totalidad de los niños y niñas del mundo goza de esta normatividad, la realidad es que éstos viven y dan cuenta de un lamentable abismo, sobretodo si se toma en cuenta que en México hay al menos 39.2 millones de niños, niñas y adolescentes de los cuales el 63 por ciento ha sufrido algún tipo de violencia; el 18 por ciento, no tiene un adecuado nivel de desarrollo; el 33 por ciento padece de obesidad y sobrepeso; el 82 por ciento no alcanza los aprendizajes esperados y el 51 por ciento se encuentra en situación de pobreza, de los cuales dos de cada 10 viven en situación de pobreza extrema, según datos referidos por el Fondo por las Naciones Unidas para la Infancia de 2019", lamentó el doctor José Francisco Muñoz Valle, rector del Centro Universitario de Ciencias de la Salud (CUCS) de la UdeG.
Norma de Jesus Villafaña Preciado, directora de Prevención de la Procuraduría de Protección a Niñas, Niños y Adolescentes de la entidad, reitera que es un tema delicado pues los mismos abusos se generan en el seno familiar.
Destacó que hacen trabajo de "blindaje emocional" desde la primera infancia para que los niños sepan detectar cuando alguien cercano a ellos tiene una aproximación con "otra intención".
La titular indicó que las denuncias han incrementada debido a que ya existe valor por parte de los padres de las víctimas para hacerlo.
Además, asegura que generalmente los victimarios fueron abusados en alguna etapa de su vida por lo que se les debe ofrecer ayuda, principalmente psicológica.
Las penas de cárcel por dicho delito son de 6 años en adelante.