No hubo apoyo, pero sí ganas. Erick Rubén Tapia Navarro vive en Tlajomulco, estudia Ingeniería en Electrónica y el mes pasado llegó a la ciudad Conghua, Guangdong, en China, para participar en el RoboRave Internacional 2019, competencia de robótica en la que, con su compañera Sofía se llevaron el segundo lugar en la categoría SumoBot.
Él y Sofía Leesu Ochoa –estudiante de preparatoria que vive en Zapopan–, tuvieron que diseñar, construir y programar un robot autónomo para combatir con dos contrincantes que también se encontraban en el área circular, contando con sensores de luz y sensores de proximidad.
El camino no fue fácil, la universidad de Erick no lo apoyó, por eso prefiere no mencionarla. Ellos tuvieron que costear el viaje a Asia. Con todo y trabas, incluida la barrera del idioma, él y Leesu lograron destacar en un país que, consideran, les llevaba ventaja.
“Trabajamos muy duro en nuestro robot, sabíamos que teníamos una dura competencia donde el país sede tiene la ventaja por la cantidad de equipos registrados, así como robots altamente equipados, pero siempre he notado que como mexicanos tenemos gran impacto por nuestras facciones y también por nuestra inteligencia”, dice Erick orgulloso.
Durante tres días, fueron ganando varios encuentros, hasta que llegaron a los primeros ocho. Entonces se jugaron la final, contra chicos de 8 a 10 años que se llevaron el primer lugar y se coronaron ganadores, aún así el joven afirma que “nosotros también lo fuimos”.
La experiencia les dio oportunidad de convivir con competidores de distintas partes del mundo, así como de conocer nuevas culturas. Además de aprender, Erick y Sofía pusieron el nombre de Jalisco y México en alto a miles de kilómetros de casa, y demostraron que este estado tiene mucho que ofrecer a nivel local e internacional.