La lluvia en Quintana Roo ocasionó que el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, quedara varado durante 20 minutos en el avión de la compañía Viva Aerobus.
López Obrador y su equipo de colaboradores fueron los únicos que permanecieron en la aeronave a pesar de que miembros de la ayudantía se acercaron con paraguas.
No es la primera ocasión en que el mal tiempo le juega una mala pasada a López Obrador, apenas el 19 de septiembre el vuelo en el que pretendía regresar a la Ciudad de México tuvo casi 4 horas de retraso, y durante un cierre de campaña en Tepic tuvo que retrasar tres horas su evento.
“En toda esta región, en la Riviera Maya llueve muy fuerte; aguaceros, pero se quita y luego, al poco tiempo ya hay sol (…) ya estoy acostumbrado a todo esto porque lo he vivido en otros tiempos”, dijo a reporteros una vez que pudo descender.