MONTERREY.- Desde hace un año, el silencio impera en los salones de clases.
La llegada del Covid-19 a Nuevo León marcó la pauta de los últimos dos ciclos escolares.
En marzo del año pasado, luego de la confirmación del primer caso positivo de este virus en la entidad, el Gobierno del Estado decretó emergencia sanitaria y suspendieron las clases presenciales, al igual que las preparatorias y universidades.
“Me acaba de llamar el gobernador y me dice que ha decidido suspender las clase y también las guarderías cosa que me parecen muy buena acción para cuidarnos la salud a todos”, dijo el doctor Manuel de la O Cavazos.
En primera instancia la suspensión de clases presenciales era hasta el 20 de abril, pero los contagios de Covid-19 incrementaron y se tuvo que concluir el ciclo escolar a distancia.
El periodo 2020-2021 inició con la modalidad en línea y, hasta ahora, continúa de la misma manera.
A un año del comienzo de la pandemia del Covid-19 los salones de clases de las universidades, preparatorias, secundarias, primarias y preescolares continúan cerrados, mientras que miles de alumnos continúan tomando clases de manera virtual.
Mientras que los alumnos tuvieron que acondicionar un lugar de su casa como su nuevo salón de clases, algunas primarias y secundarias del Estado lucen en abandono, aunque hay otras a las que sigue acudiendo personal para hacer limpieza y evitar robos a las instalaciones.
Ante el reciente descenso en los casos positivos de esta enfermedad, los colegios y escuelas privadas han comenzado a ejercer presión sobre las autoridades estatales para volver a las aulas, pero de momento, sólo han recibido respuestas negativas.
Hasta ahora, las clases continúan en modalidad virtual, las aulas siguen vacías y una ligera capa de polvo cubre los bancos y escritorios de los salones de clases, aún a la espera de que miles de alumnos regresen.
ard