En los restaurantes y bares del distrito Colón disminuyó drásticamente la afluencia de consumidores pues es común observar las mesas vacías y algunos establecimientos cerrados debido a que su principal giro es la venta de bebidas alcohólicas.
Incluso, la afluencia de paseantes por la zona fue mucho menor a la registrada cada fin de semana.
En algunos restaurant-bar optaron por ofrecer a los clientes bebidas sin alcohol como piñadas y fresadas.