Guadalajara, Jal. En Jalisco no se tiene dato alguno sobre los lugares que fungen como Esfuerzos para Corregir la Orientación Sexual y la Identidad de Género (Ecosig), sin embargo, el doctor en Psicología Aplicada de la Universidad de Guadalajara (UdeG) aseguró que son espacios que operan de manera clandestina debido al impacto negativo que generan en las personas homosexuales, lesbianas y transgénero por mencionar algunas.
Algunos de las reacciones son suicidio en mayor medida, depresión, consumo de drogas ilícitas y relaciones sexuales de alto riesgo en el que se puede contra el VIH Sida.
“En la clandestinidad dado que muchas prácticas de estas como ya lo mencioné no son reconocidas por los organismos gubernamentales ni las comunidades científicas médicas psiquiátricas psicológicas en torno a este punto no se tiene como un dato exacto de dónde y quién dado que permanecen en estas situaciones”, dijo Cristian Israel Huerta Solano, profesor de Psicología Aplicada en el CUCS.
Huerta Solano, comentó que estos lugares que buscan reorientar las preferencias sexuales e identidad de género a través de prácticas religiosas principalmente, no están avalados por ser prácticas que violan derechos humanos.
No hay evidencia de médica o científica que avale que la orientación se puede cambiar además no hay un corpus teórico que avalen y sustente nada de eso, además de que no se siguen lineamientos éticos también de que se parta de una patología no es una situación adecuada y en muchos países son consideradas como tortura, comentó Solano.
En Jalisco, a mediados del mes de abril del año en curso, la diputada Daniela Judith Hernández retomó la iniciativa que quedó en la “congeladora” desde el 2019 donde se pide prohibir las terapias de reconversión sexual y que sean penalizadas.
Cada 17 de mayo se conmemora el Día Internacional contra la Homofobia, la Transfobia y la Bifobia, para visibilizar la desigualdad, la violencia y la discriminación de dicho sector de la población.