NACIONAL.- La Jornada Nacional de Sana Distancia centrada en reducir la movilidad cerrando oficinas gubernamentales, equivalente a 1.2 millones de trabajadores al servicio del Estado y proteger a sectores vulnerables, se prestó a actitudes “paradójicas” cómo beneficiarse de este acuerdo para trabajar, en el caso de los médicos, en la práctica privada, aseguró Hugo López-Gatell, subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud.
Luego de que la Federación de Sindicatos de Trabajadores al Servicio del Estado (FSTSE) descartó retornar de manera masiva a sus puestos hasta que se vacunen contra el Covid-19 a todos los empleados, López-Gatell explicó que extender la disposición presidencial que concluyó el 3 de mayo, no se hizo por presión sindical ni por “prebenda” sino como parte de una estrategia de retorno seguro hasta julio.
Cerrar dependencias y prescindir del 25 y hasta el 30 por ciento, por ejemplo, del personal de salud, por tener 60 años y más de edad, enfermedades crónicas, trajo consecuencias para la operación de los servicios gubernamentales, incluso, para los de salud.
En la propia disposición original se hace referencia a la decisión personal de sumarse a la lucha contra la pandemia en los momentos más críticos, en junio y julio de 2020, así como en la segunda ola de enero de 2021 y hubo quienes decidieron solidarizarse.
“Pero, efectivamente, también encontramos, cómo suele ocurrir en más sociedades plurales, otro tipo de conductas. Voy a poner un caso que no fue de una persona sino de muchas: Lamentablemente vimos a muchas personas trabajadoras de la salud, sobre todo en el sector de médicos y médicos que dejaron de ir a trabajar a su puesto de trabajo público, pero se fueron a trabajar a su campo privado, lo cual evidentemente es una contradicción porque se estaban beneficiando una disposición pública, abandonaron su responsabilidad en una institución pública pero se ocuparon en el sector privado.
“Y dicho sea de paso, hay parte de las personas que han estado reclamando que deben ser vacunadas en este momento, que están en este tipo de condición. Vean las paradojas de las cosas”, indicó durante el informe diario de coronavirus en México.
López-Gatell aseguró que extender el decreto de 14 a 17 meses, ósea de mayo a julio, para librar a los trabajadores de retornar a sus puestos de trabajo no tiene nada que ver con presiones. “No es ningún favor ni prebenda, o acuerdo que tenga que ver con lo sindical, es una disposición gubernamental para lograr la reducción de contagios y proteger a las personas vulnerables”.
Si bien, detalló, es necesario abrir las oficinas para hacer trámites, el gobierno determinó extender el periodo por una cuestión de salud pública en su conjunto: “Esto se revisa periódicamente, se hacen balances sobre el control de la epidemia tanto cuando no existen medidas de protección específicas, ahora existe la vacuna, pero la vacuna no se pone de un día para otro, vamos con el 10 por ciento de la población vacunada y nos falta 90 por ciento”, indicó el funcionario.
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