Por Lorena López
El grupo financiero CitiBanamex estimó que una victoria de Andrés Manuel López Obrador en la elección presidencial es, en este momento, el resultado más probable, pero advirtió que los cambios propuestos por él respecto a reformas como la energética, “generarían inconsistencias macroeconómicas”, como menor crecimiento económico, devaluación del peso y alza de la inflación, además de que el déficit fiscal crecería e impactaría en las calificaciones soberanas e incrementaría las tasas de interés.
“Para 2022, la diferencia sería de .7 puntos porcentuales (del crecimiento del producto interno bruto), el peso estaría 19 por ciento más débil frente al dólar y la inflación 23 por ciento más alta”, y prevé que “eventualmente haya un deterioro significativo de las cuentas fiscales, con un déficit amplio que llega a 4 por ciento en nuestras proyecciones para 2022, lo que impactaría las calificaciones soberanas y conduciría a tasas de interés más altas a lo largo de toda la curva de rendimiento”.
La nota especial La Paradoja de Abril, elaborada por analistas miembros del Departamento de Estudios Económicos y Sociopolíticos del Grupo Financiero CitiBanamex, fechado el 20 de abril, pregunta por qué el promedio del tipo de cambio peso-dólar se ubicaba en 18.17 a pesar de que López Obrador “supera a Ricardo Anaya por 19 puntos porcentuales” en las encuestas. Esta nota no registra la caída del peso frente al dólar al cierre de ese 20 de abril, el cual superó la barrera de los 18.50, una depreciación de .51 por ciento que constituye una pérdida de 48 centavos, en lo que constituye su peor retroceso en todo 2018.
Y la víspera de que esto ocurriera, en el documento se lanzó una pregunta: “¿El peso reaccionará ante el riesgo político?”, a lo cual responde que sí. “Si nuestra evaluación de las encuestas y de las implicaciones de una posible vitoria de AMLO es correcta, la respuesta sería sí. Pero los puntos de entrada importan; desde el punto de vista de los participantes en el mercado, puede tener más sentido considerar las elecciones mexicanas no como un evento, sino como un proceso”.
En el documento se señala que tanto Ricardo Anaya como José Antonio Meade “apoyan la continuidad de las reformas estructurales ya en marcha, mientras que AMLO ha sido crítico de éstas”, y que sus objeciones se traduzcan en una reversión de esos cambios “requerirá mayorías legislativas, pero aun si dicha mayoría no se logra, habría en nuestra opinión consecuencias económicas”, porque las reformas son un componente de la política macroeconómica, “por ende, una modificación selectiva del programa de reformas estructurales genera riesgos de inconsistencias”.
Para ese grupo financiero “la economía bajo AMLO enfrenta un cambio de régimen que no vemos bajo Anaya o Meade” e incluso señala que al separar el ruido en las propuestas económicas del candidato presidencial de Morena, “concluimos que la situación económica estaría peor que en nuestro escenario previo”.