Deformaciones en la columna de por vida, salvo que se les detecte a tiempo, son daños que padecen los niños al cargar mochilas pesadas cuando van a la escuela, sobre todo si las llevan en forma inadecuada, afirmó el experto Víctor Barragán.
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En entrevista con Notimex, el jefe de Traumatología del Hospital General de Zona número 14 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Jalisco, aseguró que es alta la incidencia de repercusiones cuando la columna carga peso extra.
Entre los daños más comunes, citó a la escoliosis (curvatura hacia los lados de la columna vertebral) y la artrosis (degeneración por envejecimiento prematuro de la articulación).
“Se considera que una persona puede cargar entre un 10 y 20 por ciento de su peso corporal, y es lo recomendable para los niños, entonces sus mochilas no deben ser tan pesadas”, recalcó el experto del Seguro Social.
Puntualizó que los maestros deben ser más conscientes y pedir a los niños que lleven únicamente libros y cuadernos que necesitan en su día de clase; en tanto, los padres deben vigilar las mochilas para que sus hijos no carguen cosas que no van a necesitar.
Aclaró que lo más importante para evitar deformidades en la columna es vigilar la forma en la que se carga la mochila, ya que es posible que ésta cumpla con las características recomendables pero si se utiliza de manera inadecuada traerá problemas.
Al respecto, precisó que lo más común es que los niños lleven sus mochilas en un solo hombro y ese peso se carga a ese lado ocasionando las deformidades.
“Normalmente es durante el desarrollo cuando se causan las deformidades porque es cuando el hueso está en constante cambio, y si se crece en postura inadecuada ese crecimiento ocasiona la deformidad”, afirmó.
Agregó que en edades donde terminó el crecimiento únicamente causará contracturas musculares y lumbalgias, no tanto problema en la formación del hueso.
Detalló que el crecimiento en mujeres concluye entre los 17 y 18 años, mientras que en hombres es de los 18 a los 19 años. “Antes de llegar al término de esa etapa existe el riesgo de ocasionarse una degeneración articular, una artrosis temprana, por lo que es importante cuidar a los niños”.
Sugirió que las mochilas que usan los escolares deben contar con correas de un grosor amplio para que exista mayor superficie de contacto y la carga se disipe en el hombro y no se vaya hacia la columna.
También para disminuir el riesgo de deformidades los libros y cuadernos más grandes se deben ir pegados en la espalda, los de menor peso hacia afuera; se recomienda que el niño esté derecho cuando se le ponga la mochila y si se inclina hacia adelante es señal de que tiene mucho peso y no está cómodo.
“Hay que hacer énfasis en lo que es la educación de columna que significa guardar las posturas adecuadas, desde ahí nuestro cerebro se va educando porque muchas veces adquirimos una postura a la que nos acostumbramos y se nos hace cómoda aunque esté en forma inadecuada y nos causa problemas”.
Admitió que existen enfermedades que los niños nacen con ellas, que se trata de malformaciones congénitas en su columna como la escoliosis, “pero fuera de eso los problemas son meramente posturales”.
Comentó que al Hospital General de Zona número 14, del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Jalisco, llegan al menos 15 niños por semana con problema de columna, casi todos con dorsalgias, en edades de entre los seis y 12 años.
“Llegan a consulta con dolores a nivel de la columna dorsal porque es la que lleva esa carga al final de cuentas. Son casos frecuentes y en esas edades y cuando les preguntamos nos damos cuenta que la dorsalgia fue provocada por el mal uso de las mochilas escolares”.
Por ello, insistió en que se debe respetar el peso recomendado y si se sobrepasa que los niños dividan sus útiles, que lleven algunas cosas en sus manos para no afectar su columna.