En el marco del Día de la Virgen de la Asunción, el arzobispo de León, Alfonso Cortés Contreras, dijo “necesitamos el auxilio de nuestra madre para la familia, la sociedad y la paz”, esto durante la misa dominical que ofrece cada semana en la Catedral Metropolitana de León.
El sacerdote habló de la importancia que tiene la madre en la vida de la iglesia, de Jesús, pero sobre todo en la vida de los feligreses, y ejemplificó, ¿qué madre no quiere el bien y el progreso para sus hijos en todo sentido?
Y preguntó ¿Qué madre no quiere que su hijo tenga una vida familiar, en la iglesia y en la sociedad y no quiere que vivan como verdaderos seres humanos y como hijos de una verdadera familia? Pues eso es lo que quiere María Santísima.
Explicó que por eso la iglesia proclama con dignidad fundada en la escritura y que mucha gente que no entiende el misterio de la iglesia dice que hay puros hombres dentro de la misma, pero no es así, pues la iglesia tiene verdades absolutas, y una de ellas es esta que todos vamos a morir y eso es incuestionable.
El sacerdote dijo que los dogmas no son verdades como una piedra, sino que con la fé se van haciendo amables cercanos a los seres humanos y no hay verdad más cercana que tener a una mamá que los quiera y una maternidad.
Comentó que la virgen es una mujer, humana como todos y es madre de todos y dijo que la fe católica proclama dos verdades, una de ellas es que nada ni nadie puede disminuir la soberanía y el poder de Dios y la segunda es que el único ser absoluto es Dios.
Aseguró que hay muchas formas de recibir dones como regalar algo, una caridad, dar algunos centavos a una persona a la que quiere ayudarse, pues eso ya es un ente de cambio y cambia el sentido profundo de la personas.
Dijo que también dar la vida es un don y esos son por parte de los padres quienes dan a sus hijos el primer carácter, defectos y limitaciones.