Guadalajara, Jalisco.- La fuerte granizada que cayó en la Zona Metropolitana de Guadalajara, Jalisco, la madrugada del domingo sorprendió a los habitantes de la ciudad e impactó al resto del país por las imágenes y videos que mostraban la gran cantidad de hielo que sepultó vehículos.
Y aunque pareciera algo inusual una granizada en pleno verano, son habituales y no necesariamente consecuencia del cambio climático.
Es en la época de calor cuando las condiciones son más favorables para las granizadas, el aire muy cálido y húmedo asciende violentamente (inestabilidad atmosférica) y el vapor de agua se convierte en diminutas gotas para formar nubes de desarrollo vertical (cumulonimbos).
Al paso de minutos, estas gotas aumentan considerablemente su tamaño y alcanzan diferentes alturas en donde la temperatura es inferior a los 0 grados centígrados, congelándose dentro de la nube, donde se manifiestan fuertes corrientes que obligan al granizo a ascender y descender.
En su trayecto hacia abajo, el hielo formado se encuentra con agua muy fría adquiriendo un mayor tamaño, eventualmente las corrientes de aire no lo pueden sostener y caen hacia la superficie; la cantidad y tamaño varía considerablemente dependiendo la humedad y el grado de inestabilidad atmosférica.
En el caso de la Zona Metropolitana de Guadalajara, especialmente en Tlaquepaque, debido a de los altos contenidos de humedad, el efecto orográfico y las altas temperaturas durante el día, aunado a un sistema de baja presión en la altura conformado por aire más gélido de lo habitual en niveles medios y altos de la atmósfera, acentuaron considerablemente la inestabilidad atmosférica.
Al observar las imágenes y videos es indudable que la cantidad de granizo fue considerable y en una extensa zona, sin embargo, es imposible que la atmosfera tenga el potencial de acumular hasta 1.5 metros de granizo en cuestión de minutos u horas.
Las nubes de tormentas severas generaron lluvia intensa, que provocaron corrientes de agua significativa que, por el diseño urbano de la zona, arrastró el granizo hacia las partes más bajas, donde se acumularon las grandes cantidades de hielo.
En fenómenos tan extremos como éste, nos vemos tentados a culpar exclusivamente al cambio climático; sin embargo, esto no se puede aplicar para un fenómeno en particular, también influye la mala planeación urbana.
A media que se incrementa la temperatura a nivel mundial, se incrementa la energía disponible en la atmósfera y sumamos el desmedido crecimiento de la población y grandes centros urbanos, muchos ubicados en zonas de riesgo, los daños materiales y pérdidas humanas tienden a incrementarse, aunque los sistemas de alerta y pronósticos meteorológicos mejoren como en los últimos años.
Pronóstico
Al menos durante el martes y miércoles este sistema de baja presión prevalece sobre el país y su interacción con otros sistemas meteorológicos mantiene un alto potencial por fuertes tormentas eléctricas, acompañadas de lluvia fuerte o intensa, viento fuerte y granizo en diferentes partes del país.