l ombudsman de Baja California Sur, Silvestre de la Toba Camacho, quien fue asesinado la semana pasada en La Paz, no externó a sus colaboradores que hubiera recibido amenazas por algún caso atendido por la Comisión Estatal de Derechos Humanos, afirmó Lizeth Collins, primera visitadora de la institución.
Collins, quien se quedó al frente de la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Baja California Sur, afirmó que el personal ha atendido las medidas precautorias que la CNDH ha solicitado para su protección.
"El personal de la Comisión se encuentra asustado, preocupado, sintiendo mucho temor. Para todos ha sido un suceso muy triste y lamentable", dijo y agregó que se han atendido "las medidas precautorias que la Comisión Nacional ha solicitado, buscando continuar definitivamente en esta labor y estando pendientes de que estas medidas de seguridad se cumplan".