MÉXICO.- Ramón Villarreal Hernández, El Mon, operador del cártel de los Beltrán Leyva, tiene ya un pie en Estados Unidos, porque un Tribunal Colegiado rechazó ampararlo contra su extradición, por lo que podrá ser juzgado en Texas por el homicidio de Juan Jesús Guerrero Chapa, abogado del ex líder del cártel del Golfo, Osiel Cárdenas Guillén, El Mata Amigos.
Chapa fue designado por Osiel para entregar 50 millones de dólares en efectivo y en propiedades al gobierno estadunidense, como parte de un acuerdo a cambio de reducir su condena en esa nación.
La Embajada de EU en México se comprometió a que 'El Mon' no será sometido a la pena de muerte en caso de que la Corte Federal del Distrito Norte de Texas lo encuentre responsable del crimen.
En mayo de 2018, Villarreal Hernández fue capturado en Monterrey, Nuevo León, e inmediatamente se le internó en el Reclusorio Sur. Anoche fue trasladado al penal de máxima seguridad del Altiplano, en el Estado de México, tras perder el amparo. Por unanimidad, los magistrados Emma Meza Fonseca, José Pablo Pérez Villalba y Ricardo Paredes Calderón, ratificaron la resolución de la juez Quinto de Distrito de Amparo en Materia Penal, Patricia Marcela Diez, quien negó la protección de la justicia el 6 de mayo de 2019.
MILENIO consultó el expediente donde el Noveno Tribunal Colegiado en Materia Penal confirmó declarar infundados los agravios del quejoso, quien reclamó el acuerdo de la Cancillería que lo concedió a los norteamericanos el 7 de enero de 2019.
En la sentencia, se menciona que la Suprema Corte de Justicia de la Nación estableció la posibilidad de que el Poder Ejecutivo goza de la facultad discrecional de entregar a solicitud de EU, a los mexicanos que hayan cometido delitos en aquel país.
El Tribunal puntualizó que tampoco se demostró que existiera un riesgo altamente probable de que al concederse la extradición se violaría la dignidad humana de El Mon o se le negaría un juicio justo, “pues en este momento no existe ninguna razón para pensar que el recurrente será torturado o sometido a tratos crueles, inhumanos o degradantes o inclusive a pena de muerte”. Asimismo, declaró constitucional el Tratado de Extradición firmado entre ambas naciones.
El 3 de octubre de 2017, los norteamericanos solicitaron la detención provisional con fines de extradición, orden que fue librada por un juez de control del Reclusorio Sur el 22 de diciembre y ejecutada el 22 de mayo de 2018.
Dos meses después, se presentó la solicitud formal de extradición. Los cargos que enfrenta El Mon son el de asociación delictuosa para cometer un homicidio por contrato y asociación delictuosa para cometer homicidio.
Ramón y su hermano José Rodolfo, El Gato, formaban parte de un grupo de inteligencia dedicado al espionaje en contra de grupos antagónicos y empleados de gobierno, caracterizándose por utilizar rastreadores GPS en los vehículos de sus víctimas, así consta en la acusación. Los hermanos son considerados generadores de violencia en Southlake, Texas.
En 2016, The Dallas Morning News publicó una investigación basada en documentos de una Corte estadunidense en la que se menciona que en julio de 2009, Osiel aceptó declararse culpable de los delitos de tráfico de drogas, lavado de dinero e intento de asesinato de agentes federales de EU.
Asimismo, prometió entregar 50 millones de dólares, en efectivo, ranchos y aeronaves, dinero que según el diario fue extraído de bunkers en México y transportado a través de la frontera en la cajuela de un automóvil en 2008 y 2009.
mmr
MÉXICO.- Ramón Villarreal Hernández, El Mon, operador del cártel de los Beltrán Leyva, tiene ya un pie en Estados Unidos, porque un Tribunal Colegiado rechazó ampararlo contra su extradición, por lo que podrá ser juzgado en Texas por el homicidio de Juan Jesús Guerrero Chapa, abogado del ex líder del cártel del Golfo, Osiel Cárdenas Guillén, El Mata Amigos.
Chapa fue designado por Osiel para entregar 50 millones de dólares en efectivo y en propiedades al gobierno estadunidense, como parte de un acuerdo a cambio de reducir su condena en esa nación.
La Embajada de EU en México se comprometió a que 'El Mon' no será sometido a la pena de muerte en caso de que la Corte Federal del Distrito Norte de Texas lo encuentre responsable del crimen.
En mayo de 2018, Villarreal Hernández fue capturado en Monterrey, Nuevo León, e inmediatamente se le internó en el Reclusorio Sur. Anoche fue trasladado al penal de máxima seguridad del Altiplano, en el Estado de México, tras perder el amparo. Por unanimidad, los magistrados Emma Meza Fonseca, José Pablo Pérez Villalba y Ricardo Paredes Calderón, ratificaron la resolución de la juez Quinto de Distrito de Amparo en Materia Penal, Patricia Marcela Diez, quien negó la protección de la justicia el 6 de mayo de 2019.
MILENIO consultó el expediente donde el Noveno Tribunal Colegiado en Materia Penal confirmó declarar infundados los agravios del quejoso, quien reclamó el acuerdo de la Cancillería que lo concedió a los norteamericanos el 7 de enero de 2019.
En la sentencia, se menciona que la Suprema Corte de Justicia de la Nación estableció la posibilidad de que el Poder Ejecutivo goza de la facultad discrecional de entregar a solicitud de EU, a los mexicanos que hayan cometido delitos en aquel país.
El Tribunal puntualizó que tampoco se demostró que existiera un riesgo altamente probable de que al concederse la extradición se violaría la dignidad humana de El Mon o se le negaría un juicio justo, “pues en este momento no existe ninguna razón para pensar que el recurrente será torturado o sometido a tratos crueles, inhumanos o degradantes o inclusive a pena de muerte”. Asimismo, declaró constitucional el Tratado de Extradición firmado entre ambas naciones.
El 3 de octubre de 2017, los norteamericanos solicitaron la detención provisional con fines de extradición, orden que fue librada por un juez de control del Reclusorio Sur el 22 de diciembre y ejecutada el 22 de mayo de 2018.
Dos meses después, se presentó la solicitud formal de extradición. Los cargos que enfrenta El Mon son el de asociación delictuosa para cometer un homicidio por contrato y asociación delictuosa para cometer homicidio.
Ramón y su hermano José Rodolfo, El Gato, formaban parte de un grupo de inteligencia dedicado al espionaje en contra de grupos antagónicos y empleados de gobierno, caracterizándose por utilizar rastreadores GPS en los vehículos de sus víctimas, así consta en la acusación. Los hermanos son considerados generadores de violencia en Southlake, Texas.
En 2016, The Dallas Morning News publicó una investigación basada en documentos de una Corte estadunidense en la que se menciona que en julio de 2009, Osiel aceptó declararse culpable de los delitos de tráfico de drogas, lavado de dinero e intento de asesinato de agentes federales de EU.
Asimismo, prometió entregar 50 millones de dólares, en efectivo, ranchos y aeronaves, dinero que según el diario fue extraído de bunkers en México y transportado a través de la frontera en la cajuela de un automóvil en 2008 y 2009.
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