MONTERREY.- Convertirse en abuelos cambió por completo la vida del señor Raymundo González y la señora Yolanda Ávila, quienes con el paso del tiempo han aprendido a guiar a sus cinco nietos por el camino del bien, pero sobre todo a llenarlos de amor a cada momento.
Fue hace 16 años cuando el matrimonio habitante de la zona sur de Monterrey se estrenó en su nuevo rol familiar, donde de inmediato quedaron maravillados por quien ahora es una joven adolescente.
Con el paso del tiempo, la familia creció hasta apenas hace un año que recibieron al más pequeño de sus nietos.
Tres niñas y 2 niños les llaman abuelos cada vez que los visitan o que disfrutan hacer actividades recreativas, como Santiago, quien en esta ocasión los acompañó a tener un momento de diversión.
Conscientes de la responsabilidad de guiar a sus seres queridos, pero a la vez de disfrutar el tiempo con ellos, Raymundo y Yolanda dejan un mensaje a sus nietos, para que en un futuro, al convertirse en personas de bien, recuerden por el resto de sus vidas, el gran amor de sus abuelos.
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