Ciudad de México.- Periodistas y activistas exigieron una investigación exhaustiva, seria, imparcial y transparente sobre el presunto espionaje en su contra por parte del gobierno mexicano.
La Red en Defensa de los Derechos Digitales presentó el informe "Gobierno Espía: vigilancia sistemática a periodistas y defensores de derechos humanos en México", donde señala que el gobierno espía a los comunicadores y defensores con ayuda del malware Pegasus.
"Hemos documentado 76 nuevos intentos de infección con el malware Pegasus en contra de periodistas y defensores en México. Estos ataques, ocurridos entre enero de 2015 y julio de 2016, se suman a los 12 intentos registrados en contra de científicos y activistas de la Alianza por la Salud Alimentaria en 2016", indican.
El diario estadunidense The New York Times publicó que el gobierno mexicano espía a defensores de derechos humanos, activistas y periodistas a través de un programa que debería ser utilizado para investigar a posibles terroristas.
La red afirmó que en cada caso, una o más personas recibieron mensajes con enlaces infecciosos vinculados a la infraestructura de Pegasus.
Aseguró que la Procuraduría General de la República (PGR), el Centro de Investigación y Seguridad Nacional (CISEN) y la Secretaría de la Defensa Nacional adquirieron el malware en los últimos años.
"Cuando una persona es atacada con Pegasus, recibe un mensaje SMS en su teléfono, el cual contiene un texto que busca persuadirlo de hacer clic en un enlace infeccioso, haciéndose pasar por una noticia, un aviso o el mensaje de un familiar o amigo. Si la persona hace clic en el enlace, su teléfono recibe inadvertidamente un software malicioso que permite al atacante, entre otras cosas, tener acceso a todos los archivos guardados en el dispositivo, así como controlar la cámara y el micrófono del celular", explicó.
Mencionó que todos los objetivos fueron atacados usando una infraestructura común, además de existir coincidencias entre los mensajes recibidos por diferentes personas.
"Resulta preocupante que el uso reiterado de estos ataques en contra de periodistas y defensores de derechos humanos se dio durante coyunturas críticas de su labor; todas, con un actor en común: el gobierno federal", apuntó.
Explicó que personal del Centro Prodh recibió intentos de infección durante coyunturas como el décimo aniversarios de la represión en Atenco, la discusión de la Ley General contra la Tortura o la presentación del informe final del caso Ayotzinapa por parte del GIEI.
Mientras que en el caso de Aristegui Noticias, los mensajes recibidos ocurrieron durante sucesos como la exoneración del presidente Peña Nieto por el conflicto de interés de 'La Casa Blanca' o la publicación de reportajes relacionados con la figura presidencial.
El periodista Carlos Loret de Mola recibió intentos de infección cuando escribía sobre las ejecuciones extrajudiciales en Tanhuato, Michoacán.
Personal del Instituto Mexicano para la Competitividad fue objetivo de ataques con el malware Pegasus durante la discusión de la ley 3 de 3, en tanto que dos periodistas de Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad recibieron mensajes tras la publicación del reportaje sobre la red de empresas fantasma del gobierno de Javier Duarte, en el cual colaboró la organización.
Detalló que los casos de espionaje a periodistas, defensores de derechos humanos y activistas anticorrupción son absolutamente insostenibles jurídicamente.
Señaló que los hallazgos de este reporte apuntan a la comisión de graves delitos y violaciones a derechos humanos.