CIUDAD DE MÉXICO.- La cifra de más de 33 mil sospechosos acumulados de covid-19 en México resulta ser “una cantidad baja con respecto a la acelerada transmisión de la pandemia”, aseguró Jorge Baruch Díaz Ramírez, vocero de la pandemia por la Universidad Nacional Autónoma de México.
Se tratan de personas que presentaron al menos tres síntomas, entre estos, dolor de cabeza, falta respiratoria o fiebre, en los últimos siete días y las cuales fueron notificadas por las unidades médicas hacia el sistema nacional de vigilancia epidemiológica para incluirlos en el reporte diario de la situación de la pandemia.
En entrevista con Milenio, Díaz Ramírez explicó que, del total de sospechosos, el 40 por ciento se encuentra hospitalizado, incluso, algunos en las unidades de terapia intensiva.
En tanto que el 60 por ciento restante se encuentra en casa y es atendido de manera ambulatoria, es decir, el proveedor de salud lo monitorea telefónicamente por un lapso de 14 días, o más dependiendo el caso.
El especialista también comentó que todos los casos sospechosos de tener posible covid serán reclasificados: ya sea que se integren a la categoría de confirmados o de negativos acumulados, inclusive, algunos, formarán parte de la base de datos de defunciones.
Para el epidemiólogo, los más de 30 mil sospechosos con posible covid-19 en México resultan, en realidad, una “cantidad baja” con respecto a la dimensión del impacto de la enfermedad por el nuevo coronavirus.
El director de la Clínica del Viajero de la UNAM, ubicada en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, precisó que la baja incidencia de reportes obedece a dos razones, una de ellas, por el empleo del “Modelo Centinela que reporta únicamente un porcentaje mínimo de las personas infectadas con enfermedad leve o moderada y la mayoría de los hospitalizados”.
Se trata, aclaró, de “un método parcialmente válido, en términos epidemiológicos, ante la imposibilidad de contabilizar a todos los enfermos, y esta situación de tener casos sospechosos sucede en cualquier país del mundo, independientemente del modelo epidemiológico que utilicen”.
Pero también, abundó, existe el hecho de que del total de personas que llegan a tener covid-19, más de la mitad, cursan y cursarán la enfermedad con síntomas leves y moderados; por lo tanto, no acudirán a los servicios médicos y serán “invisibles” para el sistema nacional de salud.
“Son pacientes que tuvieron síntomas muy leves, inclusive, tal vez algunos no se dieron cuenta de que estaban infectados con covid-19”, dijo tras referir que este sector podría, en el largo plazo, tanto haber generado defensas, o bien pasados unos meses podrían ser más vulnerables en caso de que se presente una nueva ola de contagios del mismo virus.
La peculiaridad de los casos sospechosos en México, comentó, residen en el hecho de que la pandemia se encuentra en un proceso acelerado de transmisión, por lo tanto, las notificaciones del estatus real de cada uno se están demorando más de 72 horas, inclusive, hay casos que superan los 28 días.
Los laboratorios, abundó, están saturados, están trabajando a su máxima potencia. También hay grupos que, por razones desconocidas, suben a la base de datos los casos de manera tardía, lo que complica aún más el poder determinar la situación real de la epidemia.
Lo mismo abundó, se está presentando en la extensión de las actas de defunción. La demora obedece a la falta de pruebas confirmatorias, a la tardanza de recibir los resultados confirmatorios y en algunos casos a la falta de capacitación del personal para determinar si el fallecimiento se debió por complicaciones de la enfermedad crónica de base o por consecuencia de las secuelas causadas por Sars-Cov2.
En el Centro de Diagnóstico COVID, autorizado por el gobierno federal para efectuar pruebas de detección del virus, se han efectuado 150 estudios. El índice de positividad de los pacientes atendidos, y los cuales, previamente recurren a una evaluación gratuita en línea de diagnóstico elaborado por la UNAM, es superior al 40 por ciento. En el ámbito federal oscila en 20 por ciento.
dezr
CIUDAD DE MÉXICO.- La cifra de más de 33 mil sospechosos acumulados de covid-19 en México resulta ser “una cantidad baja con respecto a la acelerada transmisión de la pandemia”, aseguró Jorge Baruch Díaz Ramírez, vocero de la pandemia por la Universidad Nacional Autónoma de México.
Se tratan de personas que presentaron al menos tres síntomas, entre estos, dolor de cabeza, falta respiratoria o fiebre, en los últimos siete días y las cuales fueron notificadas por las unidades médicas hacia el sistema nacional de vigilancia epidemiológica para incluirlos en el reporte diario de la situación de la pandemia.
En entrevista con Milenio, Díaz Ramírez explicó que, del total de sospechosos, el 40 por ciento se encuentra hospitalizado, incluso, algunos en las unidades de terapia intensiva.
En tanto que el 60 por ciento restante se encuentra en casa y es atendido de manera ambulatoria, es decir, el proveedor de salud lo monitorea telefónicamente por un lapso de 14 días, o más dependiendo el caso.
El especialista también comentó que todos los casos sospechosos de tener posible covid serán reclasificados: ya sea que se integren a la categoría de confirmados o de negativos acumulados, inclusive, algunos, formarán parte de la base de datos de defunciones.
Para el epidemiólogo, los más de 30 mil sospechosos con posible covid-19 en México resultan, en realidad, una “cantidad baja” con respecto a la dimensión del impacto de la enfermedad por el nuevo coronavirus.
El director de la Clínica del Viajero de la UNAM, ubicada en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, precisó que la baja incidencia de reportes obedece a dos razones, una de ellas, por el empleo del “Modelo Centinela que reporta únicamente un porcentaje mínimo de las personas infectadas con enfermedad leve o moderada y la mayoría de los hospitalizados”.
Se trata, aclaró, de “un método parcialmente válido, en términos epidemiológicos, ante la imposibilidad de contabilizar a todos los enfermos, y esta situación de tener casos sospechosos sucede en cualquier país del mundo, independientemente del modelo epidemiológico que utilicen”.
Pero también, abundó, existe el hecho de que del total de personas que llegan a tener covid-19, más de la mitad, cursan y cursarán la enfermedad con síntomas leves y moderados; por lo tanto, no acudirán a los servicios médicos y serán “invisibles” para el sistema nacional de salud.
“Son pacientes que tuvieron síntomas muy leves, inclusive, tal vez algunos no se dieron cuenta de que estaban infectados con covid-19”, dijo tras referir que este sector podría, en el largo plazo, tanto haber generado defensas, o bien pasados unos meses podrían ser más vulnerables en caso de que se presente una nueva ola de contagios del mismo virus.
La peculiaridad de los casos sospechosos en México, comentó, residen en el hecho de que la pandemia se encuentra en un proceso acelerado de transmisión, por lo tanto, las notificaciones del estatus real de cada uno se están demorando más de 72 horas, inclusive, hay casos que superan los 28 días.
Los laboratorios, abundó, están saturados, están trabajando a su máxima potencia. También hay grupos que, por razones desconocidas, suben a la base de datos los casos de manera tardía, lo que complica aún más el poder determinar la situación real de la epidemia.
Lo mismo abundó, se está presentando en la extensión de las actas de defunción. La demora obedece a la falta de pruebas confirmatorias, a la tardanza de recibir los resultados confirmatorios y en algunos casos a la falta de capacitación del personal para determinar si el fallecimiento se debió por complicaciones de la enfermedad crónica de base o por consecuencia de las secuelas causadas por Sars-Cov2.
En el Centro de Diagnóstico COVID, autorizado por el gobierno federal para efectuar pruebas de detección del virus, se han efectuado 150 estudios. El índice de positividad de los pacientes atendidos, y los cuales, previamente recurren a una evaluación gratuita en línea de diagnóstico elaborado por la UNAM, es superior al 40 por ciento. En el ámbito federal oscila en 20 por ciento.
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