De enero a junio del año en curso, el Hospital Regional de Alta Especialidad del Bajío (HRAEB) ofreció atención médica a mil 598 menores afiliados al Seguro Popular con padecimientos relacionados con el cáncer.
Jonathan Bueno, jefe de servicios de oncohematología y radioterapia del Hospital explicó que los pacientes mencionados reciben tratamientos de radio y quimioterapia, cirugías de alta especialización, todo cubierto por la póliza del servicio médico de origen federal.
“De enero a la fecha, el hospital ha trabajado sin problemas, hemos atendido el área de quimioterapia ambulatoria aproximadamente al día de 30 casos, en total el promedio mensual es de 570 pacientes tratados en el área de quimioterapia y es tratamiento continuo tanto en niños y adultos”, expresó.
Señaló que es más frecuente que este tipo de patologías se den más en adultos que en niños, por lo que únicamente el 10 por ciento del total de los pacientes oncológicos atendidos en el área ambulatoria son pediátricos, lo que se traduce que diariamente prestan servicio a cinco o diez menores.
“No se ha suspendido el tratamiento, nuestros pacientes han tenido el tratamiento, los pediátricos, los medicamentos que necesitan y lo que ha cursado del año no hemos dejado un niño sin tratar en materia oncológica”, señaló.
Hasta ayer, el área de oncopediatría contaba con ocho pacientes que estaban hospitalizados para recibir tratamientos, más otros siete menores que recibieron tratamiento en el turno matutino.
El especialista detalló que los medicamentos oncológicos son otorgados por una empresa previa licitación, que realiza una mezcla de tratamientos, que su vez depende de proveedores a nivel nacional que no han podido contar con el inventario habitual para completar dicho procedimiento de cura.
“Esto generó el retraso del abasto porque otro proveedor les tuvo que hacer frente al abasto entonces la semana pasada, el día de abasto cambió de un martes a un miércoles y es por eso que se tuvieron que cambiar la fechas de tratamientos para algunos pacientes pero intentando buscar lo antes posible y que tuvieran su tratamiento también correcto”, explicó.
Señaló que en casos de este tipo, la empresa con la tienen el servicio subrogado tiene la obligación de notificarles por escrito de cualquier retraso en el suministro de tratamientos, pero en que esta ocasión no fue así porque desde la farmacia no se avisó del desabasto del medicamento faltante.
Precisó que a pesar de los recortes presupuestales de origen federal en materia de salud, hasta la fecha no se han tenido afectacciones en los tratamientos médicos por cuestiones de falta de recursos económicos, que ha sido suficientes para satisfacer la demanda de sus pacientes.
“Nosotros gastamos en promedio mensual entre 3.5 y 4.5 millones de pesos para el tratamiento oncológico, de estos millones de pesos se gastan solamente para mezclas oncológicas alrededor de 400 mil pesos para el área de oncopediatría y hematopediatría”, puntualizó.