GUERRERO.- A diversos puntos del puerto de Acapulco, Guerrero, llegaron turistas provenientes de otros estados y buscaron hospedarse en Barra Vieja, Bonfil, Pie de la Cuesta y en la zona Diamante. En pleno semáforo rojo, la Secretaría de Turismo de Guerrero, informó que la ocupación hotelera reportó un 4.4 por ciento.
En la zona Náutica del Acapulco Tradicional, las hospederías reabrieron sus puertas para recibir a los visitantes.
El promedio de la ocupación hotelera se indica que Acapulco presentó 3.2 por ciento, de los cuales 1.1 corresponden a la zona Dorada.
Mientras que las hospederías de la zona Diamante continúa vacía, pero desde hace tres semanas realizan cursos para el personal en lo que será la nueva normalidad y servicio a los visitantes.
En la playa de Pie de la Cuesta los restauranteros colocaron letreros en sus negocios y algunos reabrieron sus restaurantes.
Se negaron a acatar las medidas sanitarias que impuso el gobierno de Guerrero, debido a que la entidad se encuentra en semáforo rojo y en el caso de Acapulco supera la calificación a la entidad.
Un recorrido realizado por las playas se encontró a turistas y prestadores poco sociables, pero atendiendo a los paseantes que llegaron en sus vehículos provenientes del Estado de México, Ciudad de México, Puebla y Morelos.
cog
GUERRERO.- A diversos puntos del puerto de Acapulco, Guerrero, llegaron turistas provenientes de otros estados y buscaron hospedarse en Barra Vieja, Bonfil, Pie de la Cuesta y en la zona Diamante. En pleno semáforo rojo, la Secretaría de Turismo de Guerrero, informó que la ocupación hotelera reportó un 4.4 por ciento.
En la zona Náutica del Acapulco Tradicional, las hospederías reabrieron sus puertas para recibir a los visitantes.
El promedio de la ocupación hotelera se indica que Acapulco presentó 3.2 por ciento, de los cuales 1.1 corresponden a la zona Dorada.
Mientras que las hospederías de la zona Diamante continúa vacía, pero desde hace tres semanas realizan cursos para el personal en lo que será la nueva normalidad y servicio a los visitantes.
En la playa de Pie de la Cuesta los restauranteros colocaron letreros en sus negocios y algunos reabrieron sus restaurantes.
Se negaron a acatar las medidas sanitarias que impuso el gobierno de Guerrero, debido a que la entidad se encuentra en semáforo rojo y en el caso de Acapulco supera la calificación a la entidad.
Un recorrido realizado por las playas se encontró a turistas y prestadores poco sociables, pero atendiendo a los paseantes que llegaron en sus vehículos provenientes del Estado de México, Ciudad de México, Puebla y Morelos.
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