Andrés Manuel López Obrador tomará posesión este 1 de diciembre, y aunque él ha dicho que recibirá un país en bancarrota, la Secretaría de Hacienda asegura que la administración de Enrique Peña Nieto dejará unaeconomía fuerte y con finanzas sanas.
Aquí te decimos cómo es que López Obrador heredará algunos de los principales indicadores económicos:
Tipo de Cambio
El tipo de cambio interbancario que dejará la gestión de Peña Nieto se ubica al rededor de 20.35 pesos por dólar, 57 por ciento más caro que el del primer día hábil de su administración, cuando éste era de 12.97 pesos por dólar, de acuerdo con información del Banco de México.
Éste indicador se vio afectado por diversos factores, entre ellos el triunfo electoral del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, así como el conflicto comercial entre esa nación y países como China, México y Canadá.
Producto Interno Bruto
Al tercer trimestre de 2012, antes de que Enrique Peña Nieto entrara en funciones, el PIB de México tenía un crecimiento anual de 2.8 por ciento, cifra ligeramente superior al aumento con que dejará al país.Así, López Obrador recibirá la economía mexicana con un crecimiento de 2.6 por ciento anual según cifras al tercer trimestre de 2018 del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Empleo
Peña Nieto inició su administración con una tasa de desempleo de 4.8 por ciento, la cual disminuyó hasta 3.3 por ciento al cierre del sexenio, un nivel que no se veía desde 2005, de acuerdo con cifras ajustadas por estacionalidad del Inegi.
Inflación
La inflación anual cerró octubre con un alza de 4.90 por ciento, superior al 4.18 por ciento con que la actual administración recibió el país en noviembre de 2012.
Sin embargo, en el sexenio la inflación alcanzó un pico de 6.77 por ciento en diciembre de 2017, afectada por eventos como la liberalización del precio de las gasolinas o 'gasolinazo', el cual llevó al indicador a tener su mayor aumento en 18 años.
Petróleo
El precio promedio de la mezcla mexicana cerró octubre en 73.36 dólares por barril, mientras que en 2012, año en que Peña Nieto llegó al poder, el precio promedio fue de 101.81 dólares.
Lo anterior respondió a una fuerte caída de los precios ante un sobreabastecimiento del mercado, el cual en su momento llevó a la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) a acordar un recorte a la producción.