Guadalajara.- Para Leticia de la Torre, directora desde hace 28 años de la academia de danza Past Dance, la reactivación en el ámbito artístico ha sido lenta. De las 60 alumnas y alumnos que acudían hoy por hoy sólo asisten 12.
“Olvidados si estamos porque ya abrieron muchas partes, pero por ejemplo nosotros ahorita nosotros no podemos dar clases a niños menores de 16 años”.
Su academia es una de las que logró sobrevivir tras haber permanecido sin actividades y sin ingresos económicos por seis meses consecutivos.
Leticia compartió cómo le dolía escuchar cuando sus colegas le decían que habían cerrado sus escuelas de danza, al no poder solventar los gastos.
A pesar de que algunos transitaron a la parte digital, para ella dar clases en línea fue imposible.
“Yo soy muy exagerada en la técnica, y en cuidarlas y no las podía ver ni corregir igual, tuve que descartar la modalidad digital”.
El impacto también fue emocional, salir de la rutina y de la disciplina que por años se construyó no fue fácil para Leticia, ni para sus alumnas. Consideran que a través de la danza liberan emociones que con palabras no suelen decir.
Fue muy duro porque a pesar de que tengo mi escuela, no podía venir era torturarme, me preguntaba a qué voy, si voy a estar sola.
Expresas mucho lo que sientes y cuando tienes dificultades para hablar te ayuda mucho a comunicarte, a mí me ayuda a eso.
Desde el mes de agosto que reabrió las puertas de la academia, han tenido 30 presentaciones, y para este mes prevén cerrar con seis más, situación que la anima al igual que a sus alumnas. Esperan que el 2021 este lleno de presentaciones.