El Reclusorio Preventivo de Jalisco tiene una sobrepoblación de tres mil 500 internos. Este centro penitenciario tiene una capacidad para 3 mil 631 personas pero su población actual es de casi 7 mil 200.
Sin embargo, el director de Reclusorios de Jalisco, José Antonio Pérez Juárez, comentó que a pesar de haber de 10 a 12 internos por celda, lo que podría considerarse como hacinamiento, todos los presidiarios tienen una cama.
“Nosotros no tenemos ningún interno durmiendo en callejones ni en patios, todos tienen una estancia digna donde duermen, todos tienen cama", aseguró.
El Diagnóstico Nacional de Supervisión Penitenciaria de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), publicado en 2018, reveló que el Reclusorio Preventivo de Jalisco no garantizaba la integridad del interno al detectarse sobrepoblacióm, hacinamiento, insuficiencia de programas para la prevención y atención de incidentes violentos, e insuficiencia de personal de seguridad y custodia.
Este último aspecto preocupa al titular ya que admitió que aún hay déficit de custodios.
"Nosotros tenemos un estado de fuerza mermado. Ahorita tenemos un estado de fuerza de dos mil 4, cuando lo ideal deberíamos de andar casi en 5 mil. Los estándares internacionales establecen de un custodio por cada 10 internos de baja peligrosidad”.
Mientras que en el Reclusorio Femenil la población es de 441 internas, cuando su capacidad es de 378. Cada celda es habitada por 9 mujeres.
“Hay algunas que todavía a veces no alcanzan cama ni litera, entonces quedan en el piso pero duran muy poco tiempo ahí, entonces sí son entre 9 y 12”.
Según el mismo diagnóstico, los centros penitenciarios de Jalisco acumulaban 14 quejas ante la CNDH; el estado se posicionaba como el tercer lugar con más quejas, solo después de Sonora y Nayarit.