A casi un mes de su homicidio en la colonia La Selva, familiares de Iván Hernández, el joven de 22 años de edad que fue ultimado a balazos la noche del 7 de octubre, fueron al panteón de San Nicolás a visitar su gaveta y exigen justicia, pues las autoridades no avanzan en las investigaciones.
Su mamá, Olga Hernández Olvera, estaba desconsolada llorando al pie de la gaveta donde se encuentra el cuerpo del joven, su hijo menor que a decir de sus familiares, no tenía problemas con nadie y sólo se dedicaba a trabajar.
La mujer dijo que hasta el día de hoy, a casi un mes del homicidio donde otro taxista también fue asesinado en una colonia más adelante, comentó que no sabe el por qué lo asesinaron, pues las autoridades no han esclarecido los hechos.
Esa noche se registraron dos ataques al norte de la ciudad en puntos diferentes contra dos taxistas de unidades tradicionales, el primero fue contra Iván en una calle próxima al bulevar Hilario Medina a la altura de la colonia Lomas de la Selva, donde vivía con su familia.
En ese punto se encontraba con otro de sus compañeros del volante cuando hombres armados a bordo de una cuatrimoto llegaron para atacar a Iván, mientras el otro conductor del taxi huyó del lugar, pero lo alcanzaron en la colonia Los Manantiales y lo asesinaron.
Esta tarde de Día de Muertos, familiares de Iván llegaron hasta el lugar donde descansa su cuerpo para visitarlo y recordarlo con amor y cariño, pero sobre todo con sed de justicia y mucho dolor.