CIUDAD DE MÉXICO. – El 30 de agosto es la fecha estipulada por la Secretaría de Educación Pública (SEP) para el regreso a clases presenciales; sin embargo, entre los padres de familia existe la incertidumbre sobre si mandar o no a sus hijos a las aulas ante la tercera ola de covid-19, lo cual podría repercutir en las ganancias de los comerciantes del mercado escolar.
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En entrevista para TELEDIARIO, el presidente de la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC), Cuauhtémoc Rivera Rodríguez, señaló que este regresó a clases no pinta bien para los comerciantes del mercado escolar, pues calculan que 60 por ciento de los padres de familia esta considerando no llevar a sus hijos a clases.
El director de ANPEC señaló que los padres de familia no están haciendo compras de regreso a clases como en años anteriores por la incertidumbre de enviarlos o no a clases, por lo que consideran que los estudiantes no regresarán el 30 de agosto y esperarán a que la pandemia ceda un poco para acudir a realizar compras.
La ANPEC estima para este regreso a clases una recuperación de 50 por ciento en el mercado escolar, aunque se mantienen cautelosos y sin la expectativa de un gran furor.
En 2019, las ventas por regreso a clases como uniformes y útiles escolares ascendieron a alrededor de 20 mil millones de pesos, según datos de la ANPEC; no obstante, en 2020 las ventas fueron de apenas siete mil millones, es decir, “se dejaron de vender 13 mil millones de pesos” explicó.
Se estima que en país hay alrededor de 120 mil comercios que se dedican a la venta de productos escolares, de esos han cerrado alrededor de 20 mil por efectos de la pandemia, mientras que los que se mantienen en pie han tenido que optar por implementar nuevas estrategias o bien, cambiar de giro, mientras que menos del 10 por ciento se encuentran en un punto crítico, según datos de la ANPEC.
Regreso a clases en duda
Rivera Rodríguez señaló que aunque las autoridades se muestran entusiasmadas en el regreso a clases presenciales, los padres de familia están en otra sintonía y se mantienen en duda sobre enviar a sus hijos, sobre todo porque la lógica en la mayoría de los hogares mexicanos, desde el inicio de la pandemia, ha sido cuidar a los menores, y actualmente este sector de la población es el más expuesto al contagio.
PGG