Pese a que recientemente hubo evidencias de la contaminación del Río Santiago, la Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Territorial (Semadet) de Jalisco rechaza que haya omisiones en el tratamiento de aguas.
Incluso, de acuerdo con Misael Gradilla, director ejecutivo de Protección y Gestión Medioambiental del estado, la dependencia entregó a las autoridades responsables reportes, un diagnóstico y las estrategias, desde hace un año, cuando el gobernador Enrique Alfaro Ramírez arrancó la actual administración, en los límites de Juanacatlán y El Salto. Ese día anunció obras de saneamiento y propuestas de ley que establecieran castigos más severos a las industrias que contaminen el mismo.
De acuerdo con Gradilla: “Se tendrá conocimiento de estrategias Innovación que van muy encaminadas en problemas que tiene que ver cómo el saneamiento del Río Santiago la atención al problema que tenemos con el manejo de residuos sólidos urbanos y los residuos de manejo especial, temas energéticos, temas de aprovechamiento en el sector agropecuario".
El funcionario destacó la importancia de otras secretarías gubernamentales en dicho tema ecológico.
"El tema del saneamiento del Río Santiago también se está trabajando de manera muy colaborativa con mucha secretarías. Es un tema que, por supuesto, tiene la Secretaría del Agua. Por supuesto es un trabajo muy fuerte de parte de la Secretaría de Medio Ambiente y muchas otras, sólo por mencionar algunas, y yo creo que en este caso que también se está sumando la secretaría de Innovación y todos los dependencias para tratar de resolver este problema que es tan complejo y que necesitamos una comunidad científica ahí presente".
Reiteró por parte de la Semadet existe una estrategia en la que destaca que el inicio de trabajos físicos es responsabilidad de otras dependencias: "No solamente una fase de diagnóstico ya se tiene muy clara, la estrategia está empezando a desplegar las acciones necesarias para el saneamiento. No hay conocimiento de cuáles son los trabajos los contaminantes que están ahí presentes, ya se ha generado muchos trabajos y, en realidad, del esfuerzo ya va mucho más encaminado a todas las estrategias para el saneamiento".
La próxima semana, la Semadet dará a conocer el diagnóstico de contaminantes, así como el proyecto de saneamiento.
Bolsas de acarreo
Con el objetivo de socializar los detalles técnicos de la Norma Ambiental Estatal (NAE-010/19) para la regulación de bolsas de acarreo y popotes de un solo uso, la Semadet presentó los detalles técnicos que incluye dicha Norma a los municipios que conforman el Área Metropolitana de Guadalajara (AMG).
Esta presentación se llevó a cabo dentro del Grupo de Trabajo de Gestión de Residuos del Instituto de Planeación y Gestión del Desarrollo del Área Metropolitana de Guadalajara (Imeplan), contando con la participación de representantes de las direcciones de medio ambiente de los Ayuntamientos de Zapopan, Zapotlanejo, Guadalajara, Tonalá, Tlaquepaque, El Salto, Tlajomulco de Zúñiga, Ixtlahuacán de los Membrillos y Juanacatlán.
La intención es que conozcan las especificaciones técnicas requeridas para la producción, distribución, comercialización y uso de estos productos en Jalisco, así como las propiedades físicas y químicas que definidas en la NAE, ya que de acuerdo con el decreto de ley, los ayuntamientos deberán hacer las modificaciones reglamentarias necesarias en un plazo de sesenta días contados a partir de la entrada en vigor de la presente Norma.
La NAE-010/19 fue publicada el pasado 31 de octubre de 2019 en el Periódico Oficial del estado de Jalisco y que entró en vigor el 1 de noviembre.
La NAE establece que en el caso de las bolsas de plástico para acarreo deberán incluir una cantidad igual o superior de material reciclado postindustrial, lo cual se traduce en que las bolsas presentarán un contenido de material reciclado del 20 por ciento (10 por ciento posconsumo y 10 por ciento posindustrial), en el primer año y 40 por ciento (20 por ciento posconsumo y 20 por ciento postindustrial) al final del quinto, por lo que a partir del 2020, los productores deberán comenzar a realizar las modificaciones en sus procesos de producción.
Mientras que en el caso de los popotes, por cuestiones de inocuidad, no podrán contener materiales reciclados, sin embargo, deberán demostrar ser biodegradables al ser sometidos a un proceso de compostaje conforme al estándar ASTM D6400-19.