CIUDAD DE MÉXICO.- A un año de que se permitiera el plantón del Movimiento Cannábico Mexicano en la esquina de Insurgentes y Reforma, el presidente del Senado solicitó al gobierno de la Ciudad de México retirar dicho campamento donde se consume marihuana y venden todo tipo de productos.
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Este plantón se ha mantenido vigente a lo largo de la discusión de la legalización para portar hasta 28 gramos por persona y ahora en el lugar buscan acercar distintos productos relacionados con la planta a la sociedad en general.
Hace 12 meses el área se convirtió en una zona de tolerancia para los consumidores de mariguana; apenas había un par de plantas en el espacio donde se permitió la instalación del llamado Plantón 420, que fue el primero instalado de manera legal, a pesar de que en ese momento no se permitía el consumo.
Pese a la pandemia por COVID-19, el campamento permaneció en el lugar, e incluso fue creciendo poco a poco y congregando más adeptos.
JM