Se suma otro señalamiento de corrupción y malos manejos en contra del Instituto Municipal de Atención a la Juventud de Guadalajara (IMAJ).
Esta vez, dos ex trabajadoras de la dependencia denunciaron haber sido despedidas de manera injustificada el pasado 31 de diciembre, luego de que ambas detectaron irregularidades durante la gestión de la directora Susana Priscila Álvarez Hernández, destituida el 26 de febrero.
“Nosotras declaramos que la señora había caído en nepotismo al emplear a su hermana y hermano de sangre. Había muchísima fuga de dinero en los eventos que se llevaban a cabo. Estos o no se realizaban o se realizaban con patrocinadores y ellos mismos se gastaban los recursos. Ordeñaban las nóminas. Y utilizaban los recursos del erario público para la realización de círculos ciudadanos de Movimiento Ciudadano”, contó Saidí Abigail Ríos, ex trabajadora.
Desde el comienzo de la administración, Saidí fungía como titular de la Dirección de Atención y Proyectos para Jóvenes, y Marina Márquez Delgado como encargada de Archivo. Según comenta Marina, antes de ser despedida fue hostigada por la actual directora del instituto, Claudia Iveth Reynoso Gómez, para firmar documentos en los que la hacían responsable de acciones ilícitas cometidas por Álvarez Hernández.
“Ella lo que hizo fue querer evitar que yo saliera de la oficina porque ahí me encerraron en una oficina y también llevaron a los de la Fiscalía para intimidarnos y para que nosotros tuviéramos miedo y nos querían acusar del robo”, dijo.
Ambas mujeres han denunciado el despido injustificado e irregularidades al interior del instituto ante la Contraloría Ciudadana, la Fiscalía Especializada en el Combate a la Corrupción, la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales y la Junta del Tribunal Laboral. También presentaron una queja ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos Jalisco y lo hicieron del conocimiento del alcalde Ismael del Toro. Hasta ahora no han recibido ninguna respuesta ni la liquidación que les corresponde.
Cabe destacar que la gestión de Susana Priscila Álvarez Hernández estuvo acompañada de escándalos. El primero de ellos fue cuando a tres meses de asumir el cargo, abandonó su puesto para vacacionar en Nueva york. Después fue acusada por Morena de desviar recursos y facturar despensas a nombre del instituto. Además, fue señalada de acomodar a su hermana Teresa de Jesús en la nómina del Congreso del Estado.
CGE