Durango. Aunque el fraccionamiento San Ignacio cuente con la instalación de postes de luz y luminarias en cada una, estas han dejado de funcionar en reiteradas ocasiones, desde hace 3 años el servicio de alumbrado público no ha sido constante por lo que la inseguridad se ha ido incrementando considerablemente.
Anteriormente el alumbrado encendía de manera automática y desde hace un tiempo dejó de encender por lo que entre los mismos vecinos se han turbado para encender el alumbrado.