MONTERREY.- El sistema de pensiones en Nuevo León absorbe el 12 por ciento del presupuesto no etiquetado, y crece en alrededor de dos puntos porcentuales cada año, lo que avizora un problema económico y otro social si no se encuentran los mecanismos para hacerlo sustentable financieramente, advirtió el tesorero del Estado, Carlos Garza Ibarra.
El tema, que no es privativo de Nuevo León, se analizará en el taller ‘Retos y Soluciones del Sistema de Pensiones’, que se realizará en nuestra entidad con la participación de representantes de todas las entidades, el Banco Mundial, y la federación, para buscar alternativas adecuadas.
Con un universo creciente de jubilados, solventar las pensiones representa todo un reto financiero, que al menos en el caso de Nuevo León implica inyectar recursos importantes que podrían canalizarse a obras y proyectos, si existiera un modelo sano.
Por otra parte, dijo Garza Ibarra, en unos años comenzarán a pensionarse aquellos que están en el sistemas de pensiones de aportaciones individuales, y el compromiso es ayudarlos a tener una pensión digna, pues no todos habrán aportado lo suficiente para mantener los ingresos que les dan sus salarios.
“La pregunta es cuál va a ser la pensión que va a recibir, lo que va a alcanzar, es un debate en el mundo, no sólo en México”, dijo.
El taller ‘Retos y Soluciones del Sistema de Pensiones’ se realizará el 8 de agosto próximo y participan, entre otros especialistas, Carlos Noriega Curtis, titular de la Unidad de Seguros, Pensiones y Seguridad Social de la Secretaría de Hacienda, y Pablo Saavedra, director para México del Banco Mundial, así como funcionarios de las calificadoras y secretarios de finanzas de diez estados.
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