CIUDAD DE MÉXICO. - Por tercer día consecutivo, Israel Portilla, comerciante mazahua del Centro Histórico de la Ciudad de México, se mantiene en huelga de hambre y con la boca cosida a la espera de obtener respuesta de las autoridades capitalinas.
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El comerciante a manera de protesta cosió su boca el pasado lunes para exigir a las autoridades capitalinas que, al igual que a otras organizaciones de comerciantes, se le permita vender sus productos en las calles del Centro Histórico de la capital.
Aunque su estado de salud aparentemente es estable, es visible su cansancio, aunado a que hasta el momento no ha contado con supervisión médica para evitar que las suturas puedan llegar a infectarse.
PGG