Un grupo de al menos 40 adultos mayores que hacían fila desde la madrugada se quedaron en espera de ser atendidos al exterior de donde se ubicaban las oficinas del Instituto Nacional de las Personas Adultas Mayores (Inapam), en el Centro de León.
En una cartulina, se informó que a partir del 5 de agosto las instalaciones temporales estarán sobre el bulevar González Bocanegra, esquina con Cuautepec, número 2707, en la colonia Azteca, en donde se atenderá en un horario de 9:00 a 13:00 horas, con capacidad de servicio para 30 personas diarias.
También se colocó un número telefónico para información, pero con la aclaración de que estará suspendido mientras se lleve a cabo el cambio de ubicación.
Esto generó molestia, confusión y enojo entre los adultos mayores, quienes alegaron que si bien la mayoría son pensionados, deben atender otras actividades y que además, su estado de salud no es el óptimo como para soportar tiempos de espera de varias horas por la madrugada.
Uno de los inconformes, Miguel Rivera relató que era el segundo día consecutivo que acudía a las instalaciones del Instituto ya que hasta el pasado martes personal que le atendió le dijo que le hacían falta documentos y que para obtener su credencial acudiera ayer para obtener una de las 30 fichas que se entregan habitualmente desde las ocho de la mañana, pero pasaron las 9 y las oficinas seguían cerradas.
“Nos dijeron con mucha seguridad, que viniéramos temprano a las cinco de la mañana a formarnos porque solo daban 30 fichas nada más y que les dolía mucho pero que no podían darnos otra”, relató.
“Tenemos servicios que hacer, estamos ocupados en la casa, tenemos actividades, estamos jubilados pero tenemos actividades que tenemos que estar haciendo y estamos desesperados que no nos vamos”, dijo visiblemente molesto.
Por su parte, la señora Dolores Martínez rodeó la cuadra donde se ubicaban las oficinas, entre las calles Libertad y La Paz, para revisar o preguntar a locatarios cercanos sobre la operación del inmueble, al no tener éxito, se regresó con folder en mano a su lugar en la fila, con la frustración de haber perdido toda la mañana en un trámite infructuoso.
“Se supone que abren a las ocho y hasta este momento no han abierto, no puede ser posible que tengan a estas personas (en espera), yo todavía me siento fuerte pero hay personas que probablemente estén enfermas, que traigan bastón, no puede ser posible, la verdad”, expresó.