Desde que el gobierno municipal de León, anunció que a partir del lunes 13 de abril sería obligatorio el uso de cubrebocas para todo ciudadano que transitará en espacios públicos, haciendo especial énfasis en el transporte público, las opiniones al respecto se encuentran divididas por los leoneses.
En un recorrido realizado por Milenio en las principales estaciones de transferencia del Sistema de Transporte, se pudo constatar que, a un día de la implementación de dicha disposición, el número de usuarios que hacen uso de este mecanismo de protección ha tenido un incremento considerable, sin embargo, no ha sido en su totalidad.
Personal de salud del municipio qué se encuentra proporcionando gel antibacterial en las puertas de acceso de estas estaciones y mencionaron que ha habido mayor participación de la ciudadanía durante los últimos días.
"Te podría decir que, en el transcurso de la mañana, de 50 personas 25 han entrado utilizando cubrebocas", informó una persona que labora en una estación.
"Yo creo que es muy buena idea y si nos la están recomendando es porque debemos seguirla para cuidarnos y también a los demás" comentó Bertha Cárdenas, quien además ha optado por el uso de gel antibacterial, toallas desinfectantes y el salir lo menos que sea posible a la calle, como parte de sus medidas de prevención.
Por su parte, Heriberto un hombre de edad avanzada que se ve en la necesidad de salir a laborar, ya ha adoptado todas las disposiciones recomendadas pues no sólo hace uso de cubrebocas, lleva también lentes y guantes.
"Me costó mucho trabajo conseguir dos tapabocas, tenía ya diez días que no salía, yo no sé si la gente que me encuentro en la oruga que me encuentro en todo el sistema no trae tapabocas es porque honestamente les vale" comentó molesto ante la negligencia de algunos.
Sin embargo, los más jóvenes son quienes han mostrado mayor indiferencia, al indicar que a pesar de ser conscientes de la indicación y de su utilidad no la han implementado.
"Pues si sabía que el gobierno lo había dicho, pero la verdad no lo traigo" comentó un adolescente de 19 años que salía de la base de transferencia Delta.