JALISCO.- Aún no se construye la totalidad de las 500 tumbas que ordenó el presidente municipal de Puerto Vallarta, Arturo Dávalos Peña, para enfrentar la pandemia por coronavirus.
TE RECOMENDAMOS: Indígenas, los más vulnerables en México ante coronavirus: especialista
El pasado mes de abril, el primer edil anunció la construcción de tumbas porque no quería que la contingencia sanitaria lo sorprendiera, lo que le valió un sinfín de críticas. A dos meses, se mostró contento de su decisión y hasta dijo que “en otros municipios, en otros Estados están construyendo más”.
Durante un recorrido por el Panteón El Progreso, aún se observan montículos de tierra, así como material disperso en dos puntos donde se cavan. Sin embargo, los espacios terminados no han sido utilizados, confirmó Carlos Mendoza Bernal, jefe de cementerios del municipio de Puerto Vallarta.
En cada fosa caben dos cuerpos. Han sido construidas por los propios empleados.
¿Eso no les complica el trabajo diario? “Descuidar una cosa para hacer otra, lo tenemos que hacer de todos modos, porque si hacemos 500 podemos hacer mil, mil 500 para cuando se necesiten”, comentó.
¿Pero hay espacio para construir las tumbas que se requieran? “No mucho espacio, pero se habla de un cementerio nuevo, pero desconozco dónde y cuándo va a ser”.
¿Ya es necesario contar con otro? “Es necesario, hay demanda para demanda cremar e inhumar, pero no soy yo quien debe decirlo, pero bueno, todo se hace aquí por necesidad y porque tenemos que estar preparados ya sea por covid-19, influenza, diabetes, sea lo que sea, tenemos que estar preparados para darle un mejor servicio la ciudadanía”.
De ahí que se construirán las 500 que pidió el alcalde Arturo Dávalos Peña, y las que “se necesiten”. ¿Ustedes salieron más previsores? “Mi presidente”, sonrió.
Puerto Vallarta cuenta con cinco cementerios municipales y la capacidad de cada uno de ellos, es variable. El panteón El Progreso es uno de los más extensos. De acuerdo con Mendoza Bernal, no se han registrado entierros de personas fallecidas por covid-19. Al menos a él, no le han mostrado una sola acta de defunción con esa causa de muerte.
Eso sí, el municipio extremó medidas para evitar contagios por coronavirus. Por ejemplo, a los familiares se les pide que desde la puerta del panteón se despidan de sus seres queridos.
“Oye, es que quiero traer música, tócale lo que quieras afuera; rézale lo que quieras afuera, velo y abrázalo, llévale flores allá afuera, Aquí de la línea del cementerio para adentro va directo, se baja, se sella y se acabó”, advirtió.
¿O sea ya no se les permite pasar? “Si pueden entrar, pero pueden expandirse tenemos un espacio de seis hectáreas, ahí pueden ver (al familiar) a 50 o 100 metros”.
El jefe de cementerios del municipio de Puerto Vallarta, Carlos Mendoza Bernal, explicó que desde el momento en que se para una carroza con el féretro a la puerta del cementerio, se checan documentos para luego bajarlo y sellarlo.
“Nosotros no tenemos ninguna autorización de dejar que las personas lo abran, tampoco ceremonia religiosa que quieran hacer, nada va directamente a la fosa”, sostuvo.
JM