Al crear fruterías ambulantes con las que recorren las comunidades rurales de Torreón y Gómez Palacio, jóvenes del ejido Lucero del municipio de Tlahualilo han logrado vencer el desempleo en su comunidad y evitar emigrar hacia el vecino país del norte.
Salomé Barrios y Eduardo Martínez recorren desde temprana hora y hasta al oscurecer media docena de poblados para acercar a las amas de casa productos de la canasta básica a precios más accesibles que las grandes cadenas de supermercados.
Este negocio que aprendieron de sus padres les ha permitido cubrir los gastos familiares y el mantenimiento de las camionetas que utilizan para el trabajo diario.