El rector de la Universidad Autónoma del estado de Morelos, Alejandro Vera Jiménez, y el ex tesorero de esa institución Eduardo Sotelo Nava fueron vinculados a proceso por el delito de peculado por más de 600 millones de pesos.
Luego de una audiencia de más de siete horas, el juez Adolfo González López dictó el auto de vinculación a proceso a Vera Jiménez y Sotelo Nava bajo el criterio de que no utilizaron los recursos para fines personales, pero con su manejo sí pusieron en peligro a dicha casa de estudios.
El criterio del juez deriva de los señalamientos de la Fiscalía Estatal Anticorrupción que acusa a ambos de utilizar el presupuesto anual de la UAEM para pagar un crédito bancario, el cual fue solicitado y obtenido de forma irregular, es decir, sin el consentimiento del Congreso estatal.
De acuerdo con la indagatoria, Vera Jiménez y Sotelo Nava son responsables de comprometer el ingreso mensual propio de la UAEM para pagar ese préstamo (ya que fue ofrecido en garantía), lo que ha derivado en una crisis financiera en la institución que catorcenalmente tiene dificultades para pagar las nóminas de trabajadores administrativos, académicos y de confianza, por lo que el déficit de la máxima casa de estudios ya alcanza los mil millones de pesos.
La audiencia y la determinación del juez se efectuó pese a la ausencia del rector de la UAEM, quien argumentó un padecimiento circulatorio, por lo que su abogado Ricardo García Bravo presentó la receta correspondiente como justificante médico para validar la ausencia.
García Bravo también pretendió utilizar la inasistencia “justificada” del rector para diferir la audiencia, lo cual no le fue concedido, como tampoco le fue reconocido el reclamo por la reposición de esta audiencia, pese a que el mismo juez ya la había declarado suspendida el pasado 1 de octubre, cuando se percató que la Fiscalía Anticorrupción había incurrido en irregularidades para acusar a los universitarios.
En el tiempo de las exposiciones y alegatos, el juez recordó a la defensa de Vera Jiménez y Sotelo Nava que independientemente de los reclamos, la sala tercera del Tribunal Superior de Justicia le había ordenado reponerla y así se cumplió la indicación.
El rector llega a esta audiencia con otro proceso penal en su contra, pues la Fiscalía Anticorrupción lo acusa a él y a su esposa María Elena Ávila Guerrero de enriquecimiento ilícito.
El pasado sábado policías y elementos de la Fiscalía llegaron hasta la casa del rector y su esposa en el municipio de Emiliano Zapata y a través de una orden de cateo intentaron hacer valer la orden de aprehensión, pero no los localizaron.
Sin embargo, el lunes Vera Jiménez obtuvo una suspensión provisional por parte de un juzgado federal, no obstante no se ha presentado en público desde el fin de semana.
La mañana de este miércoles, su abogado, Ricardo García Bravo reconoció que la ausencia del rector y de su esposa de actos o actividades públicas se debe al temor fundado de que pueda ser aprehendido por algún “otro asunto” que le hayan acelerado en su contra.
Al respecto, el presidente de la Barra de Abogados, Miguel Ángel Rossete Flores, cuestionó la celeridad con que avanzó la solicitud de revocación de la audiencia de vinculación a proceso anterior desde el Poder Judicial.
Indicó que un asunto que pude llevar hasta ocho meses se resolvió en 24 horas, curiosamente –dijo- cuando era el único resquicio judicial que existía para mantener sujeto a Vera Jiménez a un proceso judicial, evitar que se escabullera y gozar de libertad, luego de la suspensión de la orden de aprehensión.