CIUDAD DE MÉXICO, 7 mar (Reuters) - El asesor de alto rango de la Casa Blanca Jared Kushner se reunió el miércoles con el presidente de México, Enrique Peña Nieto, y el canciller Luis Videgaray para transmitir un mensaje del mandatario estadounidense, Donald Trump, sobre la importancia de seguir avanzando en iniciativas conjuntas, dijo la cancillería en un comunicado.
No obstante, una posible reunión entre los líderes de ambos países dependerá del avance alcanzado en los acuerdos vinculados con su relación integral, incluyendo el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y otros temas, agregó el texto.
Los funcionarios de ambos países discutieron temas como el "combate a las organizaciones criminales, al tráfico de drogas, armas y efectivo entre ambos países", así como seguridad fronteriza y migración, junto con un proyecto de programa de movilidad circular para trabajadores agrícolas.
Diplomáticos y líderes de oposición en México dijeron que aunque Kushner, yerno del presidente Donald Trump, es visto como un conciliador, hay mucha tensión y se percibe que ha perdido poder en la Casa Blanca tras una disputa sobre sus privilegios de seguridad en el Gobierno de Estados unidos.
"Kushner está muy debilitado y va a seguir debilitado. Y, sobre todo, lo que el venga a decir aquí, Trump lo va a desmentir el día siguiente. Entonces es una tontería", dijo Agustín Basave, un destacado legislador opositor del Partido de la Revolución Democrática (PRD).
Un funcionario de Estados Unidos dijo que uno de los objetivos del viaje de Kushner era reducir las tensiones que estallaron cuando Trump y Peña Nieto tuvieron una ríspida llamada telefónica el mes pasado, lo que condujo a la postergación de una planeada reunión entre ambos líderes.
Videgaray ha sido criticado por lo que ha sido visto como el énfasis que pone en su relación con Kushner.
Cuestionamientos a la visita se plantearon incluso por funcionarios del Ministerio de Relaciones Exteriores de México, quienes temen que la diplomacia tradicional se haya debilitado por el enfoque de Videgaray en los contactos personales.
Las relaciones de la política exterior de México con Estados Unidos se han vuelto "extremadamente ilógicas", dijo un diplomático de alto rango el miércoles. Otro dijo que funcionarios fueron sorprendidos por la visita y frustrados por no haber sido informados.
Trump, que ha llamado a los inmigrantes ilegales mexicanos "violadores" y quiere que México pague un muro fronterizo, es profundamente impopular en su vecino del sur. El lunes lanzó una nueva diatriba diciendo que México necesita hacer más para evitar que las drogas fluyan hacia el norte.
A pesar de las preocupaciones sobre la visita de Kushner, la estrategia de Peña Nieto y Videgaray de intentar interactuar con el Gobierno de Trump recibió apoyo de sectores inesperados, incluido el candidato de izquierda para las elecciones presidenciales de México en julio.
"Deseo que la visita del familiar de Donald Trump para entrevistarse con el presidente Peña sea para el bien de las dos naciones. Es mucho mejor el diálogo, buscar el entendimiento, que la confrontación", dijo Andrés Manuel López Obrador.
Su opinión fue compartida por un líder del gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI).
"(La visita es) un reconocimiento de Trump de que ha tensado demasiado la relación con México", dijo el congresista Víctor Manuel Giorgana. "A Estados Unidos, bajo ningún concepto, le conviene tener una confrontación tan abierta con México en el marco de todo lo que esta haciendo Trump". (Redacción México. Editado por Javier López de Lérida y Carlos Aliaga)
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