La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, ha manifestado un compromiso firme de actuar con “mucha seriedad y responsabilidad” ante el trágico descarrilamiento del Tren Interoceánico ocurrido el pasado 28 de diciembre.
El incidente se registró en la Línea Z, específicamente en el tramo entre Nizanda y Chivela, Oaxaca, mientras el tren cubría la ruta de Salina Cruz a Coatzacoalcos.
Gobierno establece tres puntos para gestionar descarrilamiento del Tren Interoceánico
El gobierno federal ha establecido tres prioridades claras para gestionar esta crisis:
Atención prioritaria a las víctimas
La mandataria subrayó que la prioridad número uno es garantizar la atención a las víctimas y sus familiares.
El accidente dejó un saldo lamentable de 13 personas fallecidas y 109 atendidas en hospitales, de las cuales 44 permanecen hospitalizadas, mientras que 9 personas fueron atendidas en el sitio.
Instituciones como la Secretaría de Marina, el IMSS, el IMSS Bienestar y el ISSSTE se encuentran desplegadas en la zona.
Por ello, Sheinbaum anunció que se trasladará personalmente al lugar de los hechos para hablar con las familias afectadas, e informó que se ha habilitado el número telefónico 5522 302106 para brindar asistencia directa a los familiares.
Esclarecimiento de los hechos con rigor técnico
La segunda prioridad es determinar con exactitud qué causó el descarrilamiento, en el que una locomotora y cuatro vagones salieron de las vías.
Ante esto, la Fiscalía General de la República (FGR), en coordinación con la fiscalía estatal, lidera los peritajes bajo estrictas cadenas de custodia.
Además, un elemento clave en esta investigación es el registrador electrónico, también conocido como caja negra del tren, el cual almacena datos sobre la velocidad, posición del acelerador y presión de los frenos.
Sheinbaum enfatizó que se debe esperar el resultado de estas investigaciones antes de especular sobre la reanudación del servicio.
Garantía de seguridad e infraestructura
Como tercera medida, se busca asegurar la integridad de la vía antes de operar nuevamente.
Es relevante señalar que, cumpliendo los protocolos internacionales, se informó que una camioneta exploradora inspeccionó las vías 90 minutos antes del paso del tren y reportó que estaban en condiciones óptimas.
No obstante, el gobierno realizará una revisión exhaustiva de la Línea Z y otras líneas para garantizar la seguridad de los pasajeros y de las toneladas de carga que este corredor transporta.
Finalmente, la jefa del Ejecutivo aseguró que se mantendrá una comunicación constante y transparente con la ciudadanía, informando diariamente si es necesario, hasta que el suceso quede plenamente esclarecido y la infraestructura sea segura para su funcionamiento.
TEHV