El ataque armado registrado ayer en un palenque clandestino ubicado en el municipio de Zinapécuaro, Michoacán, fue considerado como “una masacre” por el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Durante la conferencia matutina de este lunes en Palacio Nacional, el mandatario informó que el saldo reportado por la fiscalía del estado fue de 19 muertos y seis heridos.
“Fue una masacre de un grupo contra otro en un palenque clandestino donde estaban, y llegaron ahí, balacearon a los asistentes y hubo, desgraciadamente, muchos muertos. También heridos, están siendo atendidos seis”, dijo.
En tanto, el mandatario dio a conocer que ya salió un equipo de la Federación a Zinapécuaro para contribuir en las indagatorias.
Ayer se dio a conocer que un ataque armado en un palenque entre presuntos civiles armados en la localidad de Las Tinajas, municipio de Zinapécuaro, Michoacán, dejó un saldo de al menos 19 muertos, según informó la fiscalía estatal.
La institución inició una carpeta de investigación con relación a los hechos ocurridos. Fue aproximadamente a las 22:30 horas que la dependencia fue informada sobre la agresión perpetrada contra asistentes al palenque que se celebraba en dicha localidad.
Previamente, el Presidente declaró que ya se están teniendo buenos resultados en materia de seguridad, porque se cambió completamente la política para enfrentar al crimen.
Mencionó que sus opositores nunca lo van a reconocer porque están contra su gobierno, además de que su ideología es conservadora y fascista, “entonces por eso se ríen, porque para ellos es ley fuga, pena de muerte, mátalos en caliente, así piensan”.
“Aunque se burlen, ya es otra política, es atender las causas, no se puede enfrentar la violencia con la violencia, el mal con el mal, el mal hay que enfrentarlo haciendo el bien y vamos avanzando, ya son buenos los resultados en esta materia. Decían que no se podía, se burlaban que sostenía que abrazos no balazos, porque tenemos maneras distintas de pensar”, remarcó.
Finalmente insistió en que el ex presidente Felipe Calderón debe explicar por qué le dio tanta confianza a su secretario de Seguridad, Genaro García Luna, actualmente preso en Estados Unidos por su presunta relación con el crimen organizado.
mvls