El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador reconoció que el proyecto del Gas Bienestar se encuentra en pausa, pero adelantó que se reiniciará y ampliará dicho programa, pues “cumplió su propósito”.
Desde su conferencia mañanera en Palacio Nacional, el mandatario argumentó que los distribuidores se estaban “pasando de la raya”, por lo que tuvo que entrar el Estado para controlar los precios.
“(Gas Bienestar) está en pausa porque tenemos otras tareas y se logró detener el aumento en el precio. Tomamos la decisión porque se estaban pasando, no como dice (Ricardo) Sheffeld, yo diría: de la raya”, dijo.
Destacó la importancia de que interviniera el Estado, pues sus opositores neoliberales deseaban que la distribución quedara al mercado y con el falso deseo de que se disolviera el gobierno, “porque cuando quebraban los bancos, ahí si entraba el Estado, al rescate de las instituciones financieras, como cuando el Fobaproa”.
“Por eso se detuvo, pero el proyecto está ya ensayado y es cosa de ampliarlo nada más. Pero logró su propósito, porque estamos hablando de 450, 420 el cilindro de 20 litros, que es lo que más consume la gente humilde, las colonias, los cilindros, entonces eso está controlado”, explicó.
López Obrador agradeció a los distribuidores que, dijo, actuaron con responsabilidad, pues se debe tener ganancias razonables sin voracidad, y criticó a la Comisión Federal de Competencia por sancionar a quienes dan precios bajos, cuyo destino “se los dejo a los que van a llegar”.
cog