En el asesinato de Javier Campos Morales y Joaquín Mora Salazar, sacerdotes jesuitas en Cerocahui, Chihuahua, las autoridades locales deben dar una explicación "a fondo", señaló el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Durante La Mañanera, el mandatario comentó que José Noriel Portillo Gil, El Chueco, presunto asesino, era un delincuente con orden de aprehensión vigente moviéndose con plena libertad y patrocinador de un equipo de béisbol.
Además, reiteró que es necesario conocer el estatus del delincuente en la región, a qué se dedicaba y si había contubernio con las autoridades para que no lo detuvieran.
"Esto último de los asesinatos de los sacerdotes en Chihuahua merece una explicación de las autoridades locales a fondo, porque cómo es posible que con orden de aprehensión esta persona se moviera con toda libertad, que fuese patrocinador de un equipo de béisbol y que todo mundo supiera a qué se dedicaba y no lo tocaran, por qué, cuál era su estatus, tenía que haber ahí contubernio con autoridades y aquí hemos hablado del tema", subrayó.
López Obrador mencionó que muchas veces la convivencia surge de los apoyos que se dan en campañas políticas porque para imponerse o hacer fraude hacen acuerdos con grupos dedicados a la delincuencia.
"Y crearon monstruos y toda una red de complicidades de componendas, entonces sí tienes mucha razón, pero hay que también tener confianza porque se va avanzando. Puede haber campañas de gente sin escrúpulos, cínicos, cretinos, dicen que es lo mismo que antes, no, no. Y se prueba con hechos y con datos", apuntó.
elmm