Con ayuda de hidrantes de la red contra incendios, un grupo de 15 trabajadores petroleros del barco Atares y de la plataforma Autoelevable West Titania frustraron la irrupción de piratas modernos a estas instalaciones.
La decisión de los empleados y su rápida capacidad de respuesta impidieron a los delincuentes concretar un atraco.
Información obtenida por MILENIO revela que la madrugada del pasado jueves, grupos de entre tres y cuatro tripulantes a bordo de dos embarcaciones ribereñas llegaron a las instalaciones del barco Atares y la plataforma West Titania.
“Eran como las tres de la mañana cuando nos percatamos de la presencia de las embarcaciones, todo fue muy rápido. Mientras combatíamos a los asaltantes, un compañero pidió auxilio”, explicó un trabajador.
Los petroleros expresaron su temor debido a que en el año se han presentado con mayor frecuencia ataques como este.
“Logramos repeler el abordaje, similar a como hacían los galeones españoles hace más de 300 años para evitar que los filibusteros se llevarán sus riquezas, pero en esta ocasión no fue fuego de artillería, sino chorros de agua de los equipos contra incendio, que tienen gran presión”, dijo.
Personas cercanas a Petróleos Mexicanos confirmaron el hecho, sin embargo, no se emitió información oficial, como ha ocurrido en ocasiones anteriores.
La plataforma autoelevable West Titania se localiza al sur del campo Hokchi.
En el año se han perpetrado 22 atracos a plataformas y barcos de Pemex, así como a compañías en la Sonda de Campeche.
Al respecto, la senadora Rocío Abreu Artiñano, presidenta de la Comisión de Energía, aseguró que el modus operandi de los piratas es el mismo, por lo que se presume que un mismo grupo ha puesto en jaque la seguridad en las plataformas petroleras.
“Los piratas llegan en las noches y suben a las instalaciones; en dos atracos se llevaron 60 equipos de respiración, tubería y han dañado un tablero de control y una bomba de fluidos, equipo de suma importancia para la actividad petrolera, lo que pone en riesgo la seguridad de los trabajadores y de las instalaciones”, señaló en entrevista con MILENIO.
La legisladora, quien es la primera mujer en presidir la Comisión de Energía, resaltó que la situación es preocupante “por lo que significa Pemex para el ingreso del país. Solo lo que recaudamos, un billón 156 mil millones de pesos, un negocio que te da esa cantidad obliga antes que nada a cuidar de su personal”.
Con 22 atracos registrados en lo que va del 2022, Abreu Artiñano destacó que, aunque estos ataques criminales no han dejado víctimas mortales que lamentar, es que precisamente lo que las autoridades deben evitar.
“Tenemos el riesgo de que en cualquier momento haya un deceso y eso es lo que no vamos a permitir”, apuntó la senadora.
También expuso que el robo de equipo fundamental para las plataformas de perforación y extracción representa un alto riesgo.
“No queremos que se repita lo del accidente en la plataforma Ixtoc: tener víctimas humanas, provocar una catástrofe ecológica y daños al patrimonio de la nación”, dijo la legisladora.
cog